Con el mercado veraniego cerrado, el Barça cierra una plantilla de ensueño para volver a competir por todos los títulos de nuevo. Habiendo reforzado varias posiciones donde se carecía de jugadores con nivel necesario, la afición vuelve a sentir que este año se presenta como una oportunidad para recordarle al mundo quién es el Barça.
Ante un inicio de liga arrollador, el FCB se ha vuelto una máquina de marcar goles y de no encajarlos. Xavi ha dado con la tecla: sus jugadores entienden perfectamente que quiere de ellos el míster, y lo ejecutan de la forma más precisa posible. Si bien no todo es perfecto, este gran inicio genera esperanza entre los culés.

Los Fichajes, clave
Después de la gran limpieza hecha en el vestuario, el club ha reforzado con jugadores de gran estatus varias posiciones que carecían de nivel desde hacía años. Los goles de Lewandowski, la imponencia de Koundé y las arrancadas de Raphinha son un claro ejemplo del porqué de la mejora considerable del equipo.
El equipo tiene herramientas que antes no poseía, lo que permite al entrenador utilizar determinados jugadores según el tipo de contexto que se presente. Con la plantilla completa, y con cada posición cubierta por dos jugadores o más, hacen que el tramo final de temporada se pueda superar con las pilas más cargadas, algo clave para subsistir entre los más grandes.

Xavi, el artícife de este nuevo Barça
Si bien hay muchos factores que han hecho subir el techo del equipo, la gran culpa de que la ilusión haya vuelto a Barcelona es en gran parte por Xavi. El catalán ha sabido transmitir a sus jugadores lo que necesita de ellos, así como lo que no necesitaba de otros. Su sinceridad y confianza ayudan a los jugadores a sacar lo mejor de ellos, cosa que se traduce en mejores resultados.

El tiempo dirá, pero lo que está claro es que el club vuelve a recordar a ese Barça que tanta ilusión despertaba entre los aficionados. Al fin se puede ver luz al final de un túnel que se ha hecho muy largo.