Se acabó la liga. Victoria del Real Madrid con un gol en el tiempo de descuento que deja al Barça a 11 puntos de los blancos cuando restan solo seis jornadas. Los de Xavi se pusieron hasta dos veces por delante en el marcador, pero Bellingham ajustició un campeonato que estaba muy complicado
Dos errores, dos goles
El Clásico empezó con un Barça intentando dominar y un Real Madrid que quería buscar ese espacio a la espalda. No obstante, a los cinco minutos de encuentro, los culés ponían el primero en el marcador gracias a un cabezazo de Christensen. Tras un semi fallo de Lunin y la pasividad de Kroos, el danés remataba a placer y ponía la primera ventaja para los azulgranas.
Tras este tanto el Madrid se hizo dueño del balón y empezó a amenazar la portería de Ter Stegen. El empate no tardaría en llegar, en el minuto 17 Lucas Vazquez caía dentro del área y el árbitro pitaba penalti. Vinicius no fallaba desde el punto de penalti y ponía el empate en el marcador, resultado con el que se llegaría al descanso.
Esta primera parte no estuvo exenta de polémica, sobre todo en una jugada tras un remate de Lamine que saco de dentro Lunin. El VAR decidió que el balón no había entrado por completo, acción que no revisó el árbitro.
Falta de contundencia
La segunda parte comenzó con un Barça que ya había realizado dos cambios, Christensen y Frenkie de Jong lesionados. El caso de Frenkie es el que más preocupa, pues no pudo salir caminando del campo y obligó a Xavi a meter a Pedri antes del descanso. El caso del mediocentro no está claro, pero tiene pinta de que puede estar tocado muscularmente.
Su sustituto, Fermín, fue el autor del segundo gol del Barça, tras un rechace que no acierta a despejar la defensa merengue. La acción viene precedida por un buen centro de Lamine, que fue el mejor jugador azulgrana superando a Camavinga una y otra vez. Sin embargo, tan solo cuatro minutos después, Lucas Vázquez ponía el 2-2 gracias a un centro de Vinicius.
Hubo otra jugada polémica, Rüdiger hace una pantalla a Fermín dentro del área sin intención de jugar el balón. Acción que tampoco se revisó y que aumentó las quejas en un banquillo culé que estaba ya de por sí cabreado por ese gol fantasma.
Otra vez en el tiempo de descuento
Al igual que sucedió en el partido de la primera vuelta, Belligham marcaba el tercero y culminaba la remontada. Con un Lucas Vázquez protagonista de nuevo con un centro al segundo palo que remata el inglés sin oposición. El Real Madrid acaricia la Liga en un partido en el que, quizás, fue demasiado castigo para el Barcelona.
