Un jugador de cabello corto y canoso aparece en primer plano con el escudo del Manchester City de fondo sobre un fondo amarillo.

Lo último entre Gavi y De Jong puede hacer que el neerlandés se vaya del Barça: Lío

El canterano culé ha vuelto con fuerza en pretemporada y amenaza el rol de una pieza clave

Después de varios meses fuera de los terrenos de juego por lesión de larga duración, Gavi ha vuelto a la dinámica del Barça con la energía y determinación que lo caracterizan. Su participación en los primeros entrenamientos y amistosos de pretemporada ha dejado claro que su recuperación ha sido completa. Y también ha demostrado que conserva las cualidades que lo convirtieron en uno de los jugadores más importantes de la plantilla en las últimas temporadas.

El futbolista formado en La Masia ha mostrado desde el primer momento su intensidad habitual, su capacidad para presionar y su compromiso en cada acción. Estas señales positivas no solo tranquilizan al cuerpo técnico y a la afición, sino que también refuerzan la idea de que el equipo contará con una pieza clave desde el arranque. Su regreso amplía las opciones de Hansi Flick a la hora de configurar un mediocampo competitivo y adaptable a diferentes situaciones de partido.

Un regreso que altera la competencia interna

El buen momento de Gavi no es únicamente una gran noticia para el Barcelona; también supone un cambio en el panorama interno de la plantilla. Hasta hace pocas semanas, Frenkie de Jong parecía tener asegurada su presencia como titular indiscutible junto a Pedri en el mediocampo. Sin embargo, el alto nivel mostrado por el canterano en la pretemporada ha abierto la puerta a que el neerlandés pueda ver reducido su protagonismo en determinadas alineaciones.

Flick valora las cualidades de ambos futbolistas, pero es consciente de que, en algunos partidos, un perfil más físico y agresivo como el de Gavi puede aportar un plus importante. Esta situación podría llevar a que De Jong sea reservado o adaptado a otros roles, mientras el joven andaluz gana terreno en la lucha por un puesto en el once inicial.

Dos perfiles, dos estilos de juego

La competencia entre Gavi y De Jong no es solo una cuestión de rendimiento individual, sino de enfoque táctico. El neerlandés ofrece control de balón, capacidad para conducir y romper líneas desde atrás, y una visión privilegiada para iniciar ataques. Por su parte, Gavi aporta presión tras pérdida, intensidad en cada jugada y una velocidad en la circulación que eleva el ritmo colectivo.

Para Flick, disponer de estas dos opciones es un privilegio que le permite variar el planteamiento según el rival y el momento del partido. La decisión de a quién alinear no será fija, sino que probablemente se adapte a cada contexto competitivo. Lo que sí parece seguro es que el regreso de Gavi ha elevado la exigencia en el mediocampo culé, y que esta competencia interna podría convertirse en un motor de rendimiento.