El mercado de fichajes entra en su fase más decisiva y algunos movimientos inesperados empiezan a tomar forma. Uno de los más sorprendentes es el que vincula al Atlético de Madrid con un futbolista del FC Barcelona, hasta hace poco, parecía tener garantizado su futuro en el club catalán.
El conjunto de Diego Simeone ha trasladado su interés de forma directa a la dirección deportiva azulgrana. Fuentes cercanas aseguran que no se trata de un simple tanteo, sino de un ofrecimiento serio para incorporarlo este verano. El jugador, por su parte, estaría abierto a escuchar la propuesta si su rol en el Barça sigue siendo limitado.
En la directiva culé, encabezada por Deco, no descartan la salida. Aunque el futbolista está bien considerado internamente, la posibilidad de reforzarse con un perfil que cubra necesidades urgentes convierte la operación en atractiva.
Un cambio de planes en la planificación del Barça
El guion inicial para la temporada era claro: mantener el núcleo joven y consolidar las promesas más destacadas del equipo. Sin embargo, la reciente marcha de un defensor experimentado ha alterado de manera drástica los planes de la plantilla azulgrana.
La salida ha generado un vacío evidente en una línea que ya estaba algo corta de efectivos. Hansi Flick ha sido claro con Deco: si se produce una baja, debe llegar un refuerzo inmediato que cubra esa posición. No se trata de aumentar plantilla, sino de equilibrarla en zonas clave para la temporada.
El Atlético, consciente de esta necesidad, ha puesto sobre la mesa una propuesta difícil de rechazar para el Barça. No solo ofrecerían un jugador que encaja perfectamente en las exigencias de Flick, sino que también facilitarían un acuerdo rápido y beneficioso para todas las partes.
El perfil que busca el Barça
La secretaría técnica del club considera que la mejor forma de resolver esta situación es con un intercambio directo. La idea es no comprometer el presupuesto y, al mismo tiempo, obtener un futbolista que pueda entrar de inmediato en la rotación.
El perfil deseado está bien definido: un jugador capaz de actuar en el eje defensivo y en el lateral. Debe contar con experiencia en partidos de alto nivel y la capacidad de adaptarse al estilo azulgrana. Esta polivalencia resulta fundamental para una temporada con tantos frentes competitivos abiertos.
La propuesta del Atlético cumple gran parte de esos requisitos, y en el Barça valoran que el traspaso no implique un gran gasto. La clave está en cerrar los últimos flecos antes de que el mercado cierre oficialmente sus puertas.
Una operación estratégica con mucho en juego
En la directiva saben que aceptar este intercambio supone un riesgo: el jugador que saldría todavía tiene margen de crecimiento. Sin embargo, la urgencia por cubrir la baja en defensa y el encaje del futbolista ofrecido por el Atlético inclinan la balanza hacia el sí.
Los últimos días de mercado se presentan intensos, con las conversaciones avanzando y las partes cada vez más cerca del acuerdo final. Si no surge ningún contratiempo, el anuncio oficial podría producirse antes del cierre del mercado de fichajes.
Finalmente, la sorpresa queda al descubierto: el Atlético quiere a Marc Casadó, y el Barça contempla cambiarlo por un lateral o central rojiblanco para cubrir la salida de Iñigo Martínez.
