En Barcelona siguen trabajando en la planificación de la próxima temporada. Tras un año donde ha faltado mucha pólvora arriba, la cúpula directiva está decidida a fichar a un extremo.
El club está decidido en intentar fichar un jugador que posea la capacidad de generar desequilibrio por el flanco izquierdo y que, al mismo tiempo, se ajuste perfectamente al 4-3-3 clásico del Barça.
A pesar de eso, la prioridad absoluta en este mercado de fichajes sigue siendo la incorporación de un pivote de primer nivel. Debido a la situación económica que atraviesa el club, lo más probable es que no tenga dinero para reforzarse en ambas posiciones.
Las soluciones que hay en el equipo
Si finalmente no se puede acudir al mercado, el club azulgrana deberá decidir quién ocupará el extremo izquierdo, una posición que ha quedado huérfana desde la marcha de Neymar.
Los tres jugadores que lucharán por hacerse con el puesto serán Ferran Torres, Ansu Fati y Raphinha, quien puede actuar también por la izquierda.
Tras una temporada a un gran nivel, el valenciano es el que más números tiene de quedarse. Con 11 goles y 4 asistencias, el delantero ha demostrado que puede ser un jugador muy útil para el equipo.
Una de las ventajas de Ferran es su polivalencia. Posee la versatilidad para actuar como extremo en ambos flancos, como delantero centro o como segunda punta, lo que lo diferencia del resto de los delanteros de la plantilla.
El caso de Raphinha es un poco distinto. El brasileño llegó a Barcelona como extremo derecho, sin embargo, la irrupción de Lamine Yamal ha relegado al ex del Leeds a un segundo plano.
Su futuro no está nada claro y podría ser uno de los jugadores que abandonara el equipo este próximo verano.
El que más complicado lo tiene es Ansu Fati. Lejos de recuperar su mejor versión, el jugador regresará de Brighton sin tener demasiado claro cuál será su futuro. A pesar de tener buenas actuaciones en Inglaterra, el extremo no ha logrado ganarse la titularidad con De Zerbi.
El principal deseo de Ansu es volver al Barça a partir de junio, aunque el club no vería con malos ojos una venta. La necesidad de conseguir ingresos podría precipitar
El caso João Félix
El portugués ha sido una de las decepciones de la temporada. Tras llegar en verano con mucha ilusión, la falta de constancia ha terminado por diluir a un jugador con un talento excepcional.
Félix tendrá que volver a Madrid el 30 de junio. El jugador aún forma parte de la entidad colchonera que tendrá que decidir sobre su futuro. En Barcelona tienen claro que no podrán pagar un traspaso, así que la opción más viable será la de pedir otra vez la cesión del delantero.