Lamine Yamal ya es una estrella mundial. Nadie lo duda. A sus 17 años recién cumplidos mientras disputaba la Eurocopa, el joven futbolista culé ya ha demostrado al mundo que está capacitado para liderar al Barça y a la Selección Española.
No solo es lo que hace visualmente en el terreno de juego, sino cómo decide. A su corta edad, sorprende la capacidad que tiene en los partidos para escoger siempre la mejor opción para la jugada.
Sus números además, empiezan a ser una cosa muy seria este año. Esta temporada, con apenas cuatro encuentros disputados con el Barça, acumula ya un gol y cuatro asistencias. Cifras que si las mantiene esta temporada, pueden acabar repercutiendo en muchas alegrías para el Barça.
El salario de Lamine Yamal, al detalle
En consecuencia a su nivel, el Barça ya blindó al jugador todo lo que podía. La normativa, cuando todavía no has cumplido los 18 años y firmas un primer contrato profesional, prohíbe hacer contratos de más de tres años.
Por eso, el año pasado, el Barça renovó a Lamine Yamal hasta el 2026. No obstante, el club sí trató de asegurarse su futuro completamente y por eso le puso una cláusula de 1.000 millones.
Sin embargo, su sueldo sigue siendo el de un futbolista que está empezando su andadura profesional. Para hacernos a la idea, según desvela el portal 'Capology', Lamine percibe un salario anual de 1.670.000 millones de euros. Una cifra que, teniendo en cuenta su estatus actual, es irrisoria.
El Barça tiene un acuerdo verbal para renovarle hasta 2030
Aun así, el club se cubrió las espaldas ante el posible interés de los grandes de Europa por Lamine Yamal. Lo hizo pactando un nuevo contrato con Jorge Mendes, su representante, para ejecutarlo una vez haya cumplido los 18 años.
Según informó hace un par de meses el Diario Sport, este lo ataría al Barça hasta 2030 con un salario acorde a su nivel. Aunque, obviamente, desde que se firmó su primer contrato hasta ahora, han pasado muchas cosas y el nivel de Lamine ha aumentado exponencialmente.
Por eso, se espera que sea necesario negociar unas cifras que se acerquen al estatus que tiene ahora el jugador, que no es otro que el de una estrella mundial.