El equipo de Xavi logró una victoria importantísima, no solo en lo deportivo, si no también en lo económico. Los primeros 20 minutos fueron los mejores de la temporada, eliminando al Nápoles del campo y jugando un fútbol de puro ADN Barça. Y como no, la cantera de nuevo demostrando que la edad es solo un número, que no mide tu calidad como jugador.
Un primer tiempo para soñar
Desde el pitido inicial, el Barça se comportó como un grande de Europa, algo que parece que se había olvidado. Los primeros 20 minutos del equipo azulgrana estuvieron repletos de intensidad, robos en campo contrario y de ocasiones de peligro. La defensa napolitana no podía contener a los culés, quienes se hicieron con el balón, disipando cualquier duda sobre como saldrían al partido.
Lo mejor de esto fue que esto se tradujo en goles, además de manera muy consecutiva. El primero llegó tras una gran internada de Raphinha, pase atrás y Fermín la empuja al fondo de las mallas. Dos minutos después, en el 17, Raphinha dispara, pero da en el palo, y el rebote llega a las botas de Cancelo que solo tiene que empujarla.
Comienzan las dudas
Ambos goles hacían justicia a lo que se estaba viendo, con un Barça muy superior y con un Lamine que dirigía todo el ataque. No obstante, el nivel de presión bajo, y en un despiste de Cancelo, llegó el primero del equipo italiano. Buen balón de Di Lorenzo para Politano, que supera al portugués, la cede atrás y el central, Rrahmani, solo tiene que cruzarla.
A partir del gol del Nápoles, parecía que al Barcelona se le presentaban de nuevo los fantasmas de Europa. Es cierto, que los italianos no generaban ocasiones, aparte del gol lo más peligroso fue un remate de Di Lorenzo que palmeó Ter Stegen. Acababan los primeros 45 minutos con una sensación agridulce, ya que el resultado era positivo, pero el partido seguía abierto.
Partido sentenciado y a cuartos
Los segundos 45 minutos se dividieron en varias fases, la primera de ellas en la que los napolitanos se hicieron con la posesión. Los italianos tomaron el control del partido, en parte gracias a sus laterales y a un Lobotka que dirigía todos los ataques. La segunda fase llegó gracias a los cambios de Xavi, los cuales proporcionaron un nuevo escenario de partido.
Tanto Oriol Romeu como Sergi Roberto fueron claves para que los de Xavi recuperasen el balón y tomaran el control del partido. Gracias a estas sustituciones, Gundogan se acercó al área rival, otorgando al Barça una mejor transición ofensiva y mejora en el último pase. Fruto de esta mejoría, llegó el tercer tanto y definitivo de la eliminatoria, obra de Lewandowski tras una gran jugada colectiva.
Pau Cubarsí, MVP del partido
Al final del partido, Cubarsí fue nombrado como el mejor jugador del partido, en su debut en Champions League. En cuanto a datos, ganó los 6 duelos que tuvo, con un 90% de acierto en el pase, fallando solo 7 pases de los 68 que intentó. Y ahora, a esperar el rival de cuartos, que se conocerá este viernes alrededor de las cuatro de la tarde.