El futuro de Raphinha ha sido una duda constante para la dirección deportiva del Barça y, por ende, una situación que genera incertidumbre en el entorno del club. A pocos días de iniciar la pretemporada, en el cuadro catalán siguen sin tomar una decisión definitiva sobre el extremo brasileño. Y es que la apertura del mercado de fichajes veraniego supone que habrá incorporaciones importantes, pero debe haber salidas 'sacrificadas' para que las entradas puedan llevarse a cabo.
Con la participación consumada de Raphinha en la Copa América tras quedar eliminado a manos de Uruguay, su nombre ha vuelto a ponerse sobre la mesa en las oficinas del club. Esta vez, con la finalidad de tomar una medida final a fin de que todas las partes estén conformes. Así, en el Barça hay una misión significativa, la cual deberá pasar por la enrocada postura del brasileño.
Objetivo trazado
Que el Barça necesita reforzarse es algo evidente, considerando que el primer equipo viene de ser protagonista de una temporada decepcionante. No obstante hay un aprieto financiero significativo, el cual implica que el club necesita hacer caja con alguna salida para poder reinvertir recursos. Frente a ese panorama, y según lo mencionado por el Diario Sport, el objetivo principal del Barça pasa por llegar a la regla del 1:1 del Fair Play Financiero con premura.
El medio en cuestión señala que para poder cumplir con los pedidos de Hansi Flick, en la dirección deportiva hay dos futbolistas señalados y que no tienen una continuidad garantizada. Se trata de Raphinha y Ronald Araújo, considerando que el Barça tiene 50 días para convencer al internacional brasileño de que acepte las ofertas que tiene para irse. En ese contexto, el mercado saudí emerge como una alternativa que ya ha puesto los ojos sobre Raphinha, siendo el Al-Hilal el cuadro que más destaca en la 'puja' por él.
Raphinha se cierra
A un sector del club le encantaría vender a Raphinha ―quien tiene buen cartel en el mercado y maneja varias ofertas―, aunque la postura del extremo es clara: no se mueve. El extremo brasileño le ha trasladado a la dirección deportiva del Barça que no piensa salir del primer equipo y que su intención pasa por afrontar su tercer curso en blaugrana. Una decisión que choca directamente con las intenciones de la secretaría técnica, sabiendo que desde Arabia se ofrecen 100 millones por la estrella brasileña.
El balón está en el tejado de Raphinha: según el Diario Sport, el extremo es inflexible, y así ha sido desde que terminó La Liga y se concentró con Brasil. En ese sentido, Deco tiene 50 días para intentar convencer a su antiguo representado de emigrar a la Liga Saudí, donde está garantizado que le recibirán con los brazos abiertos. A estas alturas, una venta de Raphinha (como mínimo 80 millones) daría todos los beneficios al Barça para maniobrar en el mercado y dar un salto de calidad.