Se puede decir que para muchos, la ilusión es el motor de nuestras vidas. Para el Barça y para sus barcelonistas, por supuesto, también lo es. Sin embargo, en los últimos años des de la marcha de Leo Messi, este aspecto ha tendido a ser una sensación demasiada efímera en Barcelona.
Las alegrías duran poco, seguramente engullidas por los vaivenes del club como institución y por los grandes problemas económicos que atraviesa. Eliminados de Copa y Supercopa en apenas tres semanas, el Barça se aferra a la Liga y la Champions para salvar la temporada.
Pero para suerte, siempre hay un hecho al que agarrarse y confiar: La Masia, una auténtica mina de oro. Esa fuente inagotable de talento que copa de ilusiones y orgullo todos los corazones culés incluso en los peores momentos. Por eso, aún habiendo caído en Copa, son muchos los aficionados que tienen la ilusión de ver al equipo por los jugadores de la casa.
La decisión del Barça sobre La Masia
El Barça y su presidente no son ajenos a ello. Joan Laporta es el primer orgulloso de que en el primer equipo afloren talentos como el de Lamine Yamal o Héctor Fort. Por eso, y provocado por la delicada situación económica, según 'Barcelona Noticias', el Barça está decidido a cambiar de rumbo en cuanto a la política de los fichajes.
En el club apenas pueden maniobrar debido al impago de Líbero por el 49% de Barça Studios y eso dificulta todos los fichajes e inscripciones. Además, aunque el Barça consiguiera inversores para paliar este problema, el margen seguiría siendo casi nulo.
Por todo ello, el Barça tiene pensado darle mucho más protagonismo a La Masia y por ende, a todo el talento que tenía ya la plantilla procedente de la casa. Un Barça con los pilares de Araujo, Pedri, Gavi o Alejandro Balde, sumado a los futbolistas que se están sumando, es el objetivo.
Lamine Yamal, Cubarsí y Héctor Fort, nombres sobre los que construir
En San Mamés, los jóvenes fueron la nota positiva de un Barça que sucumbió ante la fuerza de los 'leones'. Héctor Fort, que salió por Balde en los primeros minutos, se doctoró en La Catedral junto con Lamine, que marcó un golazo, y Cubarsí, un metrónomo en defensa.
Por eso, en el club saben que no encontrarán jugadores en el mercado que valiendo mucho dinero, puedan ofrecer lo que ellos ofrecen de talento, personalidad y entrega. Los resultados dirán, pero el Barça estará más saneado si confía en los jóvenes y deja de ir a buscar al mercado lo que ya tiene en casa. Porque, por delante de cualquier fichaje galáctico, ellos son la ilusión de los culés.