Brasil es ampliamente reconocido como uno de los mercados más prolíficos en la exportación de talento futbolístico. Ahora vuelve a ser objeto de atención por parte del conjunto catalán.
Actualmente se está disputando la "Copinha", un trofeo que sirve como gran escaparate para todo el fútbol formativo brasileño. Los culés ya han enviado un departamento de 'scouting' para estar pendiente de cualquier jugador que pueda interesar en un futuro no muy lejano.
En medio de medidas de austeridad para reducir gastos, el Barça intensifica aún más su presencia en la "Copinha", a pesar de los recortes presupuestarios. Esta elección contrasta con la ausencia del club en el último Mundial sub-17, donde los azulgrana no tuvieron ningún representante.
Esta inversión se percibe en el club como una inversión estratégica para el futuro. En medio de un contexto económico complicado, el Barça ha adoptado una estrategia para captar talentos.
Esta táctica se centra en la captación temprana de futbolistas, permitiendo al club anticiparse a otros competidores europeos. Sin las mismas capacidades económicas, el Barça tiene que buscar alternativas para asegurarse posibles futuros fichajes.
Caso Vitor Roque
El reciente fichaje de Vitor Roque durante el pasado verano, es un claro ejemplo de la decidida apuesta del Barça por el talento emergente. El fichaje del delantero también se fraguó después de que el club lo espera en una edición de la "Copinha".
El Barça mostró interés cuando tan solo tenía 16 años. En aquel momento el brasileño jugaba con el Cruzeiro, dónde cuajó un gran torneo. Dos años después, a sus 18 años, se convierte en el único fichaje del Barça de Xavi en el actual mercado invernal.
En Barcelona lo ven como la gran apuesta del club para su línea de ataque en los próximos años. El mismo caso que el de Messinho, el joven futbolista de 16 años que ya ha despertado el interés de varios clubes grandes de Europa. El Barça también anda tras su pista y parece ser que es el que lidera la carrera por el jugador.
Precedentes
El episodio Neymar revivió el interés en la adquisición de talento brasileño en el Barça. En 2013 se hizo con los servicios del joven jugador del Santos después de una gran pugna con el Madrid, que también lo quería. Su llegada no solo transformó la plantilla azulgrana, sino que también influyó en la importancia de fichar al joven talento nacional.
Recientemente, el Madrid repitió la historia con Vinícius, Rodrygo y Endrick.