En el mundo del fútbol es muy fácil pasar de ser el héroe a ser el villano, y más si juegas en el FC Barcelona. Desde su llegada al primer equipo, Araújo fue admirado por toda su afición hasta consagrarse como uno de los mejores centrales del mundo y uno de los capitanes de su equipo. Pero esta temporada, especialmente en el tramo final, esos aficionados que tanto le querían son algunos de los que han pedido su venta.
El origen de este descenso a los infiernos, lo encontramos en el partido de vuelta contra el Paris Saint-Germain. Donde Ronald Araújo estaba siendo de los mejores, hasta que tuvo una desconexión, algo que lejos de desaparecer, para ser una constante. El uruguayo se deja llevar por su potencia física y no mide bien los duelos que dejan a su equipo en una situación crítica.
Declaraciones incendiarias
Está claro que Gündogan viene de un equipo ganador y sus palabras iban con la mejor intención. No obstante, fueron la gota que colmó el vaso de Araújo, el cual dijo que se guardaba su opinión y que tenía unos códigos. En este caso, esos códigos a los que se aferra Ronald Araújo se deberían haber aplicado para llamarle la atención en el vestuario y defenderle ante la prensa.
Por suerte, este tema quedó zanjado, pero la lupa sobre Ronald Araújo es más que evidente. Desde el club se transmite que es una pieza fundamental, y así debe seguir siéndolo, ya que los errores que ha tenido son puntuales. Además, es una faceta que puede trabajar al igual que su salida de balón, con ello hará que no volvamos a escuchar a ningún culé pedir su venta.
La continuidad de Xavi
Con el técnico catalán un año más al frente del barco blaugrana, Ronald Araújo y Pau Cubarsí apuntan a ser su pareja de centrales titular. Cierto es que probablemente el club deba recurrir a la venta de una estrella por la situación económica. No obstante, sería un error muy grave poner al charrúa en esa ecuación, a pesar de que grandes clubes le quieren y pagarían bien.
Muchos aficionados siguen pensando que, de no ser por aquella roja, el FC Barcelona estaría en semifinales contra el Borussia Dortmund, pero toda esa ilusión que había se convirtió en desolación. Los errores de Ronald Araújo han sido pocos, pero han llegado en el momento más decisivo de la temporada. Y aunque él sea el primero que no quiere fallar, debe saber lo que comporta hacerlo con la camiseta que luce con tanto orgullo.
El tiempo pasa para todos
Aunque a algunos pueda sorprenderles, en 2025 Ronald Araújo cumplirá 26 años, por lo que es más que evidente que ya no es un joven con futuro, sino un veterano. Por este motivo, en las próximas temporadas, junto a una plantilla joven, debe dar ese paso en la elite y consagrarse. Pasando por alejar los fantasmas de este final de temporada y seguir sumando títulos, ya que otra campaña como esta sería inadmisible en can Barça.
Su contrato finaliza en 2026 y renovarle, pese a estos trágicos episodios, sigue siendo una prioridad para el club. El cual ha empezado a asomar la cabeza en la elite europea, algo que no hacía desde 2020, donde cayó trágicamente en Lisboa. Precisamente ese partido lo vio con impotencia un joven Ronald Araújo, que debe ser un pilar fundamental para esta nueva generación que debe despegar ya