La portería del FC Barcelona atravesará un cambio profundo en este mercado de fichajes veraniego. Aunque Ter Stegen ha sido un referente en la última década, la llegada de Flick y la apuesta de Deco por Joan García han dado paso a un nuevo escenario. No es para menos: el joven portero del Espanyol, considerado una de las mayores promesas del fútbol español, está muy cerca de vestir de azulgrana.
Su fichaje, que costaría unos 25 millones de euros, responde a una estrategia de rejuvenecimiento y proyección a largo plazo. En ese contexto, la continuidad de Ter Stegen no está asegurada. El guardameta alemán quiere sentirse protagonista en esta etapa de su carrera con 33 años, y si pierde su rol de titular, podría buscar nuevos horizontes antes de lo previsto.
Alternativas en el mercado
Frente a este panorama de incertidumbre, varias puertas se han abierto para Ter Stegen. Arabia Saudí lleva tiempo tanteando al portero con propuestas económicas muy superiores a las que podría ofrecer cualquier club europeo. No obstante, su prioridad sigue siendo seguir compitiendo al más alto nivel, y Turquía ha emergido como un destino atractivo: tanto el Galatasaray como el Fenerbahçe ya han mostrado interés.
Ambos clubes buscan reforzar su portería con un perfil experimentado y de renombre en la élite. Además, juegan competiciones europeas y ofrecen la posibilidad de mantener un alto nivel competitivo. En caso de que Joan García llegue al Barça con la intención de ser titular, no sería extraño que Ter Stegen vea uno de estos proyectos como vía de escape.
Un adiós que no es definitivo
Por ahora, el portero alemán no ha solicitado salir del club, pero sí ha dejado claro que quiere sentirse importante. La decisión final dependerá del rol que se le ofrezca y del plan que tenga Flick para él. Si percibe que pasará a un segundo plano, podría tomar la iniciativa y dar un paso al costado en busca de minutos y estabilidad deportiva.
Desde el club, tanto Flick como Deco valoran su liderazgo, pero no descartan una salida si se dan las condiciones adecuadas. El alto salario del guardameta y la necesidad de ajustar cuentas también juegan un papel en esta historia. La situación todavía se analiza en los despachos, pero el desenlace podría llegar más pronto que tarde si Joan García aterriza en el Camp Nou.