Jules Koundé era, hasta la novena jornada, el único jugador que había disputado la totalidad de los minutos de la temporada. En un inicio de temporada donde ya se han visto rotaciones, el lateral francés era el último superviviente del equipo culé.
El internacional galo ha sido uno de los futbolistas más importantes desde su llegada hace dos veranos, y su bagaje como titular indiscutible lo demuestra. Es por eso por lo que fue sorprendente no verleen el once, y concretamente, el motivo por el que no partió de inicio.
La gestión de Flick
Las temporadas están cargadas de partidos, por lo que es importante mantener el nivel físico y no caer en fases en las que el cansancio perjudique al equipo. Hansi Flickha gestionado con precaución la cantidad de minutos que los jugadores disputan. Una prueba fue la primera derrota en liga frente a Osasuna, donde el Barcelona sufrió las consecuencias de no salir con la artillería pesada.
Pese a esa única derrota, la gestión está siendo fantástica, y el técnico alemán ha llevado a cabo un inicio demoledor. Son ya nueve victorias en once partidos, en los cuales ha repartido minutos de una forma equilibrada. Esto permite desarrollar un nivel físico muy alto, punto vital para el estilo de juego que caracteriza a Hansi.
Jugadores como Lewandowski, Raphinha, Lamine Yamal, Cubarsí o Balde, ya han contado con descansos. A su vez, jugadores suplentes como Sergi Domínguez, Gerard Martín, Ansu Fati y Ferrán han disfrutado de oportunidades y minutos para hacerse un hueco.
La suplencia de Koundé
Koundé firmaba un pleno de minutos en este inicio de temporada, pero frente al Alavés tuvo que ver el inicio del encuentro desde el banquillo. Las especulaciones de su suplencia eran más cercanas a que Flick quería darle una oportunidad a Héctor Fort. El canterano, que no estaba contando con cierta participación, salió de titular, aunque esa no fue la razón.
El motivo de la suplencia de Koundé se debe a un retraso en la charla previa al partido de esta misma jornada, según cuenta el periodista Toni Juanmartí. Jules llegó unos minutos tarde a la sesión convocada por Flick, que se ha mostrado duro tras haber reincidido en la importancia de la puntualidad.
Esta decisión deja entrever la disciplina de Flick, incluso con los pesos pesados del vestuario como Koundé. De esta forma se consigue mejorar el trabajo y autodeterminación y sirve de ejemplo para todos, sobre todo para los más jóvenes.