La última vez que los culés jugaron en el Spotify Camp Nou fue en la jornada 37 de Liga de la temporada 2022/23. Hace prácticamente año y medio desde el traslado a Montjuïc, y el recuerdo que se tendrá de este estadio será bastante oscuro.
En cuanto a lo deportivo, Montjuïc ha sido hogar del Barça durante una época en la que, hasta la llegada de Flick, había sido trágica. Tras ganar la Liga y la Supercopa la temporada anterior, el Barcelona se mudaba al Lluís Companys con opciones de revalidar ambos títulos y hacer un mejor papel en Champions.
Por desgracia la temporada no fue en absoluto como se esperaba en un inicio; la derrota en el clásico, la dimisión de Xavi tras el 3-5, el 1-4 contra el PSG... Pero Montjuïc no solo ha sido un desastre en lo futbolístico, también en lo económico.
Una mudanza de 180 millones
La última temporada que se jugó en el Spotify Camp Nou, la 22-23; cerró con unosingresos de 229 millones. La primera temporada completa en el Estadi Olímpic generó 126 millones,lo que supone unas pérdidas de 103 'kilos'.
En la próxima Asamblea General, que tendrá lugar el próximo sábado, se informará de los 154 millones que se prevé ingresar esta temporada. Teniendo en cuenta la primera mitad en el Lluís Comanys y la segunda en el Camp Nou. Lo que supondría pérdidas de 75 millones respecto a la temporada 22-23.
En total, entre los dos años que se ha jugado en Montjuïc, se han percibido unos 180 millones menos de los que se podrían haber ingresado en el Camp Nou.
Vuelta a casa, el retorno al Spotify Camp Nou
En la segunda vuelta de la presente campaña se inaugurará el nuevo Spotify Camp Nou, aunque con capacidad para solo 62.000 aficionados. No estarán disponibles los palcos V.I.P ni el tercer anfiteatro, que cuando abran aumentarán el aforo a 90.000 localidades. Al finalizar la obra, se contará con 104.600 asientos, con los que el club espera embolsar unos 350 millones anuales.
De los ingresos que genere el nuevo Spotify Camp Nou cada temporada, los primeros 100 millones irán a las arcas del club. Gran parte del resto, será empleado para empezar a pagar anualmente a los 20 inversores que financiaron las obras del estadio. La totalidad del crédito que debe pagar el Barça se aproxima a los 1.450 millones, que deben ser liquidados en un plazo de 25 años.
Este crédito comenzará a liquidarse a partir de la temporada 2025-26, aunque las reforma no se verá completada íntegramente hasta el 2026-27.
El pasado martes, Elena Fort, la vicepresidenta institucional del FC Barcelona; confirmaba que las obras iban según lo previsto. También afirmó que albergar los partidos de la segunda vuelta no debería generar ningún retraso.