El Barcelona tiene un acuerdo de patrocinio con Nike hasta 2026, lo que ha provocado que el club esté en negociaciones con otras marcas. Las cifras del actual contrato están muy por debajo de lo que están firmando otros clubs con menor entidad europea. Los directivos del equipo azulgrana pretenden incrementar bastante los ingresos por la camiseta.
Por ello, se ha rumoreado que Puma podría ser la marca principal de los azulgranas de cara a la temporada 25/26. Ahora mismo, Nike paga 105 millones por temporada, 15 menos de los que percibe el Madrid con Adidas. La marca con sede en Alemania ha hecho una oferta bastante superior a lo que ha propuesto la actual.
Hummel, otra posibilidad
Hace unas semanas, Laporta habló sobre este tema y explicó que tenían varias negociaciones abiertas, además abrió la puerta a una nueva vía. Aclaró que existe la posibilidad de que el propio club se encargue de fabricar sus propias camisetas, y ahí es donde aparece Hummel.
Con sede en el país germano y de origen danés, Hummel podría apostar por colaborar con la entidad culé para la producción como el diseño de las mismas. Todo está supeditado a las negociaciones con Nike y Puma, puesto que son opciones prioritarias.
En cuanto a equipos que viste Hummel encontramos al Betis y a Las Palmas, además de Sabadell o Málaga. A nivel europeo, Everton o Southampton visten la marca desde hace varios años, al igual que la selección danesa.
La oferta de Puma
Las primeras informaciones que han salido sobre la oferta de Puma hablan de una oferta de casi 300 millones. Obviamente están sumadas las variables, divididas en objetivos de venta y márgenes entre otros. La cantidad fija podría llegar a los 200 millones, de hecho, este es uno de los puntos que están negociando.
La aparición de los daneses puede ser también parte de una estrategia de Laporta y Deco para que la otra marca alemana acepte algunas de sus exigencias. Puma ya firmó hace unos años un contrato muy lucrativo con el City Group, por un valor de 650 millones de libras. Busca posicionarse a la altura de Adidas y Nike, de ahí que el acuerdo con los catalanes sea tan deseado.