El inicio de temporada en el Barça ha dejado varias certezas y también algunas incógnitas en la confección del once titular. Una de las cuestiones que más debate ha generado tiene que ver con la defensa central, donde se esperaba que Christensen pudiera aprovechar la salida de Íñigo Martínez rumbo al Al-Nassr. Sin embargo, el panorama ha sido distinto al previsto y el danés no ha logrado consolidarse en los planes de Hansi Flick.
El técnico alemán ha mostrado plena confianza en Ronald Araújo, quien ha arrancado el curso con un nivel muy sólido junto al joven Pau Cubarsí. En el Trofeo Joan Gamper y en la primera jornada de La Liga, ambos ofrecieron seguridad y entendimiento, logrando mantener la portería en cero. Christensen, en cambio, ha visto cómo su rol se reducía a la suplencia.
El futuro de Christensen, en entredicho
La situación del central danés refleja una falta de confianza por parte del entrenador y, en consecuencia, una pérdida de protagonismo dentro del equipo. La inminente inscripción de Gerard Martín, junto al crecimiento de talentos como Andrés Cuenca o Álvaro Cortés, incrementan aún más la competencia en la zaga. Con este escenario, el Barça no ha avanzado en conversaciones para una renovación, y su contrato expira en 2026.
Ante este contexto, la directiva se plantea seriamente su salida en el próximo mercado de invierno. Christensen aún conserva mercado en Europa y clubes como el AC Milan han mostrado interés con ofertas cercanas a los 20 millones de euros. Para el Barça, desprenderse de él en enero tendría sentido económico: evitarían una marcha a coste cero en dos años y dispondrían de liquidez para reforzar una posición considerada clave.
Flick tiene un nuevo objetivo
La posible marcha de Christensen no se entiende como una debilidad, sino como una oportunidad para remodelar la defensa. Hansi Flick ha trasladado a Joan Laporta y a Deco su deseo de incorporar a un especialista en la posición, alguien que pueda dar garantías inmediatas y aumentar la competencia interna. En ese perfil encaja Ibrahima Konaté, actual jugador del Liverpool, quien ya ha expresado su deseo de salir de Anfield tras no renovar su contrato.
El central francés es considerado por el cuerpo técnico culé como una opción de gran nivel. Su potencia física, su solvencia en el juego aéreo y su experiencia en competiciones de máximo nivel lo convierten en un candidato idóneo para reforzar la zaga azulgrana. Laporta y Deco ven en él un refuerzo estratégico capaz de elevar el nivel defensivo y consolidar un bloque más sólido de cara a los próximos años en el Barça.