La dirección deportiva del FC Barcelona continúa con su plan de ajuste económico y deportivo de cara a la próxima temporada. Con Hansi Flick al mando y Deco liderando las decisiones desde los despachos, el club ha empezado a definir quiénes son realmente imprescindibles en la plantilla del primer equipo culé. Y en esa revisión profunda, nombres que hasta hace poco parecían inamovibles han perdido su condición de intocables.
Uno de esos casos es el de Ronald Araújo. El central uruguayo, que ha sido uno de los referentes defensivos en las últimas temporadas, ya no tiene garantizado su futuro en el Camp Nou. La dirección deportiva azulgrana considera que una buena oferta podría abrirle la puerta de salida, sobre todo si permite aliviar las finanzas del club y facilitar nuevas incorporaciones.
El mercado pone mucho dinero
Desde hace semanas, dos clubes de Arabia Saudí han mostrado un interés muy serio por fichar a Araújo. Las ofertas que preparan alcanzarían los 60 millones de euros, justo la cifra que el Barça considera adecuada para dejarlo salir. Sería un ingreso valioso, especialmente en un mercado en el que el club catalán necesita vender para poder reforzar otras posiciones clave.
El problema está en el otro lado: Araújo no tiene la intención de dejar la élite europea por el momento. El defensor quiere seguir compitiendo al más alto nivel, pensando no solo en su crecimiento como futbolista, sino también en mantenerse en la órbita de la selección uruguaya. Aunque valora al club, no está dispuesto a dar un paso que lo aleje del foco competitivo.
Flick planea cambios
Aunque el técnico alemán aprecia la intensidad y entrega del uruguayo, su idea de juego pasa por defensas con mayor capacidad para construir desde atrás. Por eso, en las oficinas culés ya se barajan otros perfiles para reforzar la zaga. Nombres como Jonathan Tah han ganado fuerza y responden más a la idea de un central con buena salida y lectura táctica.
Araújo es consciente de este contexto y, aunque su prioridad es seguir, también sabe su rol podría cambiar. De ser un fijo indiscutible, ahora se enfrenta a un escenario más abierto, donde la competencia aumentará y su continuidad dependerá no solo de su rendimiento, sino del mercado de fichajes. Por ahora, su entorno ha transmitido tranquilidad, pero no descarta valorar otras opciones si llegan ofertas de Europa.