Fermín López ha sido una de las sorpresas más positivas de la última temporada en el FC Barcelona. Con proyección, llegada y carácter, el canterano se ha ganado un sitio en la dinámica del primer equipo y ha dejado claro que quiere triunfar en el club de su vida. Sin embargo, su rendimiento no ha pasado desapercibido, y varios equipos, especialmente fuera de Europa, se han interesado en su situación.
En un contexto económico delicado como el del Barça, cada jugador con mercado se convierte en una oportunidad para hacer caja. Joan Laporta y Deco estudian distintas fórmulas para generar ingresos y liberar masa salarial, con la vista puesta en reforzar la delantera. Y aunque Fermín no es uno de los jugadores con los que se pensaba ingresar, el mercado ha movido ficha.
Oferta importante desde Arabia
En los últimos días, el Al-Ahli ha presentado una oferta formal por Fermín que ronda los 60 millones de euros. La propuesta ha sorprendido en los despachos azulgranas y ha sido catalogada como “tentadora”. Al tratarse de un jugador formado en La Masía, toda la venta sería plusvalía neta para el club, algo que ayudaría de forma inmediata al fair play financiero.
Sin embargo, ni Laporta ni Deco quieren tomar una decisión precipitada. El cuerpo técnico, con Flick al mando, considera a Fermín una pieza valiosa en la plantilla, sobre todo por su polivalencia y margen de crecimiento. Aunque no es titular indiscutible, Flick cree que puede ser importante en la rotación y ayudar a construir un centro del campo competitivo.
Fermín lo tiene claro
Pese al interés y a las cifras, el propio Fermín no tiene intención de salir. Ha transmitido su deseo de quedarse en el Camp Nou, seguir creciendo como jugador y ganarse un lugar en el once. A diferencia de otros casos, no ha presionado ni ha pedido escuchar ofertas.
La posibilidad de marcharse a Arabia no le seduce, ni en lo deportivo ni en lo personal. En paralelo, el Chelsea ha preguntado por su situación, aunque sin llegar a presentar una oferta formal. Por ahora, el Barça se mantiene a la expectativa, consciente de que la venta de Fermín podría desbloquear la llegada de un extremo.