Un jugador de fútbol frente al escudo del FC Barcelona sobre un fondo verde.

Confirmado, el Barça pagará los 100M, por el nuevo Haaland: 'Es el mejor del mundo'

Joan Laporta quiere dar un golpe en la élite y cerrar el nuevo tridente de ensueño del club catalán

En los despachos del FC Barcelona no solo piensan en el presente. Joan Laporta y Deco ya trazan un plan a medio plazo con el objetivo de construir una delantera joven, explosiva y capaz de devolver al club a la élite europea. Con el aval de Hansi Flick, la prioridad inmediata está definida: Nico Williams.

El extremo del Athletic Club es el gran deseado de este mercado de fichajes veraniego y, si todo marcha según lo previsto, muy pronto será nuevo jugador azulgrana. El Barça está preparado para pagar los 60 millones de su cláusula de rescisión, siempre y cuando logre liberar la masa salarial necesaria para inscribirlo. El entendimiento con el jugador es total y el propio Flick lo considera una pieza clave.

Plan trazado en el club

El primer paso, entonces, parece encarrilado: asegurar el fichaje de Nico Williams y empezar a construir el ataque del futuro. Pero el movimiento por Nico no será el último. De hecho, en los despachos del Barça ya se trabaja con una idea de mayor calado: cerrar en 2026 el fichaje de Julián Álvarez como heredero natural de Robert Lewandowski.

El delantero argentino es el favorito de Deco para completar un tridente que ilusiona a todo el barcelonismo: Lamine Yamal en derecha, Nico Williams en izquierda y Julián como ‘9’. Julián encaja perfectamente en el estilo que quiere implantar Flick: es móvil, asociativo, presiona bien, se mueve con inteligencia entre líneas y tiene gol. Es por eso que en el Barça consideran que su entendimiento con Lamine y Nico sería inmediato.

Con ello en mente, ya se ha iniciado el trabajo con perfil bajo. Todo apunta a que ya ha habido contactos preliminares con el entorno del jugador y la hoja de ruta es clara para ir a por él en el verano de 2026.

100 millones para cerrar el tridente

El precio de la operación no será bajo. Desde el club estiman que el traspaso de Julián Álvarez rondaría los 100 millones de euros, pero confían en que la situación financiera del Barça será más sólida en ese momento. Laporta quiere evitar improvisaciones y, por ello, ya ha dado luz verde a Deco para comenzar a preparar el terreno con tiempo.

Mientras tanto, todos los focos están puestos en Nico. Su llegada no solo reforzará al equipo en el presente, sino que también servirá como base para construir la delantera del futuro.