El Barça cierra la jornada 23 de Euroliga con una derrota en la pista del Armani Milán. Una primera parte insuficiente, sumada a las expulsiones y al bajo acierto, castigó a los de Grimau. No fueron capaces de revertir los errores cometidos y vuelven a casa con las manos vacías.
Nicolás Laprovittola se incorporó al equipo tras haber estado durante semanas fuera por molestias musculares. Sin embargo, el argentino fue expulsado tras cometer su quinta falta.
Otro descalificado fue Darío Brizuela, tras ser amonestado con una doble falta técnica.
Los de Grimau se mantienen en segunda posición y con un balance de 15-8. Para la siguiente jornada de Euroliga, recibirán a la Virtus en el Palau. Una noche que será crucial, pues ambos equipos suman el mismo balance en la competición.
Una primera parte para olvidar
El encuentro en Milán empezaba con un intercambio de golpes de ambos equipos en el que Vesely se hacía notar. Llegaba el ecuador del cuarto y los de Grimau ya estaban en bonus.
Un parcial de Armani en los últimos minutos castigaba a un Barça descontento con las decisiones arbitrales. Se daba por terminado el primer asalto con una ventaja para los locales (23-12).
Muy estático en los ataques, el Barça no era capaz de encontrar soluciones. A diferencia de los italianos, que se aseguraban de mantener el dominio del marcador (34-22), con Shields como héroe.
Los de Messina avanzaban sin oposición alguna hasta doblar el resultado. A pocos segundos de terminar, Jabari anotaba el primer triple del Barça en el tiempo disputado. Terminaba una mala primera parte que los azulgrana debían revertir para recuperar la buena dinámica en Europa (47-28).
La mejora del equipo no es suficiente
Grimau optaba por un quinteto muy físico para empezar la segunda parte. Los jugadores conseguían un buen parcial (0-6) a lo que Messina paraba el partido (49-36).
Vesely seguía tirando del carro y acercaba a su equipo hacia la ansiada remontada. El jugador más determinante de las filas azulgranas. Quedaban diez minutos y aún había partido (57-49).
Los equipos se adentraban al último cuarto con más polémicas arbitrales y un público muy enfadado. El Barça no se daba por vencido aunque no lograba alcanzar al Armani (67-58).
La suerte no sonreía al Barça. Una doble técnica para Brizuela lo descalificaba del partido. El segundo junto a Laprovittola, expulsado tras su quinta falta.
Vesely seguía remando a contracorriente para levantar a su equipo y un triple de Jabari devolvía la alegría (69-64).
Se evaporaba rápidamente tras Grimau ser amonestado con otra técnica. 4 técnicas y 1 antideportiva en total para el conjunto durante el encuentro. Un triple de Kalinic a falta de pocos segundos era la última oportunidad.
El equipo no pudo consumar la remontada y el encuentro terminó con un resultado de 74-70.