El Barça recibió al Gran Canaria durante la tarde de ayer, para enfrentar una de las últimas jornadas de la Liga Endesa. Se encontraron a un conjunto de Jaka Lakovic que dominó en la mayor parte del duelo, pero fueron capaces de remontar y sentenciar la victoria en una prórroga de infarto. Que provocó Jabari tras anotar tres tiros libres.
Un encuentro muy importante, pues era el último antes de recibir al Olympiacos para el quinto partido de los playoffs de la Euroliga. Era fundamental terminar la semana con buenas sensaciones para empezarla de la mejor manera posible. En un Palau que fue decisivo y que lo será el miércoles a las 21h.
El Barça manda en los primeros minutos
Los culers volvían a casa con mucho que demostrar, tras la derrota del jueves en el Pireo. Apartaban la Euroliga por un momento y se centraban en el encuentro liguero. Con una buena defensa y mucha intensidad ofensiva, el equipo empezaba mandando.
Principalmente gracias a unos muy buenos minutos de Satoransky (12-5). Grimau estaba optando por una rotación muy continuada para no cargar de más a su plantilla. Y paraba el partido tras un intento del Gran Canaria de recortar distancias.
Un triple sobre la bocina de Brussino daba por terminado el primer asalto. Con un resultado favorable a los visitantes (16-17), y con un Barça que debía volver a su versión de los primeros compases.
Los canarios se adelantan
El conjunto culer no encontraba el ritmo y los de Lakovic castigaban desde el triple. También eran más rápidos en los contraataques y mandaban en ambos aros. La afición del Palau despertaba a la espera que lo hicieran también sus jugadores.
Dos acciones sucesivas de Laprovittola acercaban al Barça antes del descanso. Abrines intentaba maquillar el resultado con un triple, que no entraba.
Terminaba una primera parte con muchos desajustes del Barça, que debía mejorar en la segunda (33-37). Los máximos anotadores culers hasta el momento eran Jabari, Satoransky y Willy, con 5 puntos cada uno. La anotación estaba muy repartida.
Desconexión de los culers
El Barça volvía desubicado del descanso y no encontraba el aro, hasta que Jokubaitis rompía la sequía con dos acciones seguidas. Aun así, cada vez era mayor la distancia que tenían que recuperar (37-47). Los canarios continuaban haciendo lo que querían ofensivamente y también dominaban el rebote.
Parecía que nadie en las filas azulgranas confiaba en la victoria. El último encuentro antes de recibir al Olympiacos y las sensaciones que estaban dejando en pista no eran buenas. Y llegaba la máxima del partido para los de Lakovic (45-65).
Un resultado que Laprovittola intentaba arreglar desde el triple para encarar con intensidad los últimos diez minutos.
Y los encaraban. Satoransky, Laprovittola y Vesely se encargaban de ello. Empezaban el último cuarto con un parcial de 7-0, y con el argentino desbordado desde la línea de 3.
Pero debían ser muy superiores a su contrincante para sacar adelante la victoria, ya que el tiempo se estaba agotando. Las soluciones en ataque eran muy precipitadas, hasta que el Palau volvía a encenderse. Y con él los jugadores.
A falta de un minuto, el capitán anotó dos tiros libres y situó a su equipo a un punto (74-75). Faltaban 23 segundos y el Barça necesitaba un triple más para empatar (77-80).
Lo intentaba Jabari. Lo intentaba Satoransky. Quedaba un segundo y se la volvía a jugar Jabari, sacando una falta de Brussino.
Tres tiros libres y la posibilidad de empatar el partido. Y así lo hacía. 2 segundos de infarto en el marcador y llegaba la prórroga (80-80).
Empezaba con dos acciones consecutivas de los canarios, que el Barça respondía para adelantarse (85-84). Don Nicolás Laprovittola cargaba el equipo a su espalda y empezaba a sentenciar la victoria.
Nadie lo paraba y anotaba su vigésimo noveno punto (90-84). Jabari se unía al argentino y sentenciaba el partido. Una victoria de infarto que los jugadores celebraban con el Palau (95-89).