El Barça perdió su enfrentamiento en la última jornada de la fase de grupos frente al Montpellier. Los de Carlos Ortega saltaron al campo sabiendo que el Magdeburgo había ganado. Ese resultado obligaba a los azulgranas a ganar su partido para ser primeros de grupo.
Pero después de un partido loco y con múltiples errores, el Barça selló su segunda derrota consecutiva en Champions (34 a 37).
Dika Mem, el guía de la primera parte
El partido comenzaba con un ritmo endiablado. Los dos equipos propusieron un partido rápido, veloz y muy físico. Durante los primeros compases del partido, Dika Mem condujo al Barça a tener una ventaja de 3 goles (7-4).
El capitán azulgrana completó una primera parte brillante, 6 goles en 7 lanzamientos. Nos dejó acciones para el recuerdo, como el gol saltando a dos pies. Otra acción de pasivo, Dika la resolvió con otro tanto para el Barça.
El equipo catalán se sentía incómodo con las transiciones de los franceses. El Montpellier nunca se despegó del marcador y redujo la ventaja.
El inicio del descontrol
Después de los 15 primeros minutos, el Barça perdió el control total del partido. El equipo comenzó a fallar y cometió una serie de imprecisiones.
Todo eso provocó que el Montpellier se pusiera por encima en el marcador, Carlos Ortega decidió pedir tiempo muerto. Al Barça le faltaba contundencia defensiva, eran muy permisivos con los contraataques de los galos y en ataque no encontraban soluciones.
En los peores momentos de la primera parte, apareció la figura de Gonzalo Pérez de Vargas. Con 3 paradas permitió que su equipo volviera a adelantarse en el marcador.
Pero un gol del Montpellier a falta de 3 segundos del final, permitió acercarse en el marcador (19-18). Una primera parte loca, con un ritmo elevadísimo.
El Barça desaprovecha oportunidades
Durante la segunda mitad, el Barça tuvo la posibilidad de alejarse en el marcador. Pero desperdició hasta 3 ocasiones para ponerse a tres goles de renta.
Dika Mem seguía siendo la referencia en ataque, estaba siendo el MVP de la noche. La defensa del Montpellier no podían pararle. El técnico del Montpellier pidió tiempo muerto con el objetivo de frenar a la estrella azulgrana.
En ese momento el partido dio un giro radical.
Llega la derrota
Un espectacular Hugo Monte, lateral del equipo francés, desequilibró el partido. Con 10 goles anotados, se convirtió en el MVP de la noche.
El Barça no impuso su habitual jerarquía defensiva. Permitieron muchos lanzamientos exteriores, que el Montpellier aprovechó a la perfección.
Carlos Ortega trató de cambiar el planteamiento con una 5-1, pero los franceses tenían la suerte de su parte. Un parcial de 0-5 en contra del Barça provocó una ventaja de 4 goles para los galos.
Finalmente, el Barça será segundo de grupo. Su rival para cuartos saldrá de la eliminatoria entre PSG y Orlen Wisla Plock.