El tiempo le ha dado la razón a Xavi Hernández, el técnico egarense dudaba del rendimiento del futbolista portugués que llegó al Barça cedido. Procedía del Atlético de Madrid, donde sus diferencias con Diego Simeone le hicieron perder oportunidades de jugar en el conjunto colchonero. Este año, tras confirmarse que no seguiría en el Barça, regresó al club madrileño, aunque solo estuvo durante el verano.
El luso cumplió al menos en los partidos entre el Barça y el Atlético, ya que fue el autor del único gol que dio el triunfo al equipo que entrenaba Xavi. El partido se disputó en Montjuic y el portugués se dio el gusto de ganar a los rojiblancos por primera vez como azulgrana. Algo que repitió luego en el Metropolitano llegando a anotar el 0-1 y asistiendo en el 0-2 a Robert Lewandowski.
En esos duelos cumplió, pero en el resto de los partidos, para Xavi Hernández, siempre fue un futbolista que no le convencía del todo. Por ello, él Barça decidió, a pesar de la presión de Mendes, que el tiempo de su cesión había terminado y que debía volver al Atlético de Madrid. Simeone le abrió las puertas del vestuario colchonero tras una charla previa con él y con sus compañeros, y se le dio una oportunidad momentánea.
Xavi le dio la puntilla y Flick tampoco le quiso
El jugador respondió, en la pretemporada con el Atlético, anotó un gol en Getafe, otro en Hong Kong y otro en Suecia ante la Juventus. Esa tarde disputó sus últimos minutos como colchonero, ya que unos días después se confirmó el acuerdo entre los rojiblancos y el Chelsea. Conor Gallagher abandonó Londres para fichar por el Atlético de Madrid, y el ex del Benfica se marchó de forma definitiva al Chelsea.
En el Chelsea no lo está teniendo fácil, en el último partido ante el Liverpool no tuvo minutos, lo cual ha sido la tónica habitual con el atacante de Viseu. Para Enzo Maresca es suplente; no le da la titularidad, excepto en partidos menores, aunque haya debutado con un doblete en el campo del Wolves. Sin embargo, sigue sin tener continuidad, y Xavi, e incluso Simeone, vuelven a tener razón sobre él.
Joao Félix no cuenta para el Chelsea tampoco
João Félix es un "quiero y no puedo", un jugador con condiciones, pero que no logra tener continuidad en ningún equipo importante. Quizás, por su estilo, le hubiera ido mejor quedarse en el Atlético de Madrid que ir al Chelsea, pero el luso apostó por Londres y la decisión le ha salido mal. Hasta la fecha, ha disputado siete partidos, con 283 minutos de juego, un registro escaso para los 50 millones que le costó al conjunto londinense.
Xavi tenía razón y siempre la tuvo, Joao fue un actor secundario salvo en determinados partidos para el entrenador de Terrassa. El fracaso del luso es suyo y de nadie más, pero Xavi lo vio claro en todo momento, era un jugador de ratitos.