El Bayern, tras la pérdida del título doméstico por primera vez en doce años ante el Bayer Leverkusen marcan el fin de una era. Este inesperado giro de los acontecimientos podría situar a los muniqueses en una posición sumamente delicada. Obligándolos a replantear su estrategia y abordar importantes cambios para recuperar su dominio en el fútbol alemán y europeo.
La llegada de Harry Kane al Bayern, como sustituto de Robert Lewandowski en 2021, parecía prometedora bajo la dirección de Thomas Tuchel. Sin embargo, la realidad fue otra: a pesar de los goles anotados por el inglés, la irregularidad se convirtió en la marca distintiva del equipo en esta temporada. Este revés podría tener importantes repercusiones de cara al mercado de fichajes veraniego de este año.
Después de más de una década de dominio absoluto en la Bundesliga, el Bayern de Múnich ha confirmado su fin de ciclo en Alemania este fin de semana. A pesar de haber sido imbatibles durante tanto tiempo, los bávaros cedieron el título doméstico al Bayer Leverkusen, dirigido por Xabi Alonso, quien ha dejado una marca histórica en esta temporada.
La irrupción del Leverkusen ha revolucionado el torneo. Superando a todos sus rivales y mostrando un rendimiento convincente que los posiciona como uno de los equipos a tener en cuenta en Europa en los próximos años.
¿Kimmich es una opción real?
No es un secreto para nadie que su fichaje superaría los 60 millones de euros. Una cifra que el club blaugrana no estarían en condiciones de asumir por cómo está la situación económica actual. En este verano la situación podría cambiar, por la postura del jugador, pero entrará en juego, como siempre, el factor económico.
Sería necesario un verdadero "milagro" para que el club pueda desembolsar esa cantidad, aunque es una opción que seguramente estará sobre la mesa. Este dilema financiero podría influir significativamente en las decisiones de ambas partes y en el futuro de Joshua Kimmich.
El FC Barcelona está alerta ante la posibilidad de una "limpieza" en el Bayern de Múnich de cara a un nuevo ciclo. Kimmich ha expresado su disposición a explorar las opciones que surjan en el mercado en los próximos meses. Lo que ha despertado el interés del FC Barcelona.
El club catalán ha tenido al jugador en su radar durante varios años, incluso intentaron ficharlo en 2023 como posible sucesor de Sergio Busquets. Sin embargo, en aquella ocasión, Kimmich decidió permanecer en el Allianz Arena, y las negociaciones económicas con el Bayern resultaron infructuosas. Esta situación podría abrir una nueva oportunidad para el Barcelona en el mercado de fichajes, aunque el aspecto económico seguirá siendo un factor determinante en cualquier posible acuerdo.