El arranque de Hansi Flick como técnico del FC Barcelona no solo ha llevado consigo nuevas ideas tácticas, sino también decisiones firmes en la gestión de la plantilla. En ese sentido, uno de los focos más sensibles ha sido la portería. Una posición donde el club catalán necesita claridad tras una temporada marcada por la lesión de Ter Stegen y la aparición de Iñaki Peña como un sustituto provisional.
Si bien este último ha cumplido con solvencia cuando le tocó actuar, su situación se volvió incierta tras la recuperación del alemán. Hansi Flick, con una visión muy clara del rol de sus porteros, decidió apostar por reforzar el arco con un nuevo nombre para competir con Marc-André Ter Stegen. Y esa elección ha provocado un cambio importante en los planes del club y, sobre todo, en el futuro de los canteranos más pacientes.
El mercado llama a la puerta
Tras años esperando su oportunidad, Iñaki Peña ha decidido cerrar su etapa en el FC Barcelona. El guardameta formado en La Masía no ha encontrado el respaldo esperado con la llegada de Flick. El técnico apostó por un portero de experiencia —como Szczesny—, siendo una señal clara de que el protagonismo bajo palos seguiría siendo limitado para el joven guardameta alicantino.
Así, todo apunta a que su destino será el Celta de Vigo, donde le han ofrecido un rol de titular y un proyecto deportivo atractivo. Según las informaciones recientes, el traspaso se cerrará por unos 10 millones de euros, una cifra que el Barça acepta para ganar margen económico. Para Iñaki significa un nuevo comienzo, y para el club otra muestra de que el proyecto deportivo de Flick trae consigo decisiones difíciles pero necesarias.
Flick lo tiene claro
Con esta operación sobre la mesa, el técnico culé deja claro que su planificación deportiva pasa por reforzar cada línea con jugadores que se ajusten a su idea de juego. Flick no teme tomar decisiones impopulares si considera que ayudan a fortalecer al grupo. En el caso de Iñaki Peña, su salida responde más a una cuestión de jerarquía y visión de futuro que a su rendimiento puntual.
Aun así, el técnico alemán ha mostrado confianza en otros canteranos, como Marc Casadó o Héctor Fort. Algo que indica que su proyecto sí incluye talento joven, pero con roles bien definidos. La portería, por su nivel de exigencia y responsabilidad, parece estar reservada a perfiles con experiencia inmediata.