Un futbolista sonriente aparece en primer plano con el escudo del FC Barcelona de fondo sobre un fondo morado

Ni Harry Kane, ni Julián Álvarez: El Barça prepara su fichaje más caro de la historia

La directiva busca un delantero que marque época tras el declive de Robert Lewandowski

El FC Barcelona encara una etapa decisiva en su planificación deportiva. La dirección deportiva, encabezada por Deco, es consciente de que la delantera debe renovarse de inmediato. Con Robert Lewandowski acercándose a los 37 años, la necesidad de encontrar un nuevo líder ofensivo es ya inaplazable.

El polaco ha rendido a un nivel altísimo desde su llegada, pero el desgaste físico es evidente. Flick no quiere hipotecar el futuro deportivo del club confiando en un delantero cuya carrera se acerca a su recta final. Y la afición, acostumbrada a vivir épocas doradas con referentes goleadores, exige un recambio a la altura.

En este contexto, han surgido varios nombres que parecían destinados a ocupar ese rol. Harry Kane, goleador del Bayern de Múnich, se situó durante meses como candidato. Julián Álvarez, actualmente en el Atlético de Madrid, también ha estado muy presente en los debates internos de la secretaría técnica.

se pueden ver a dos jugadores, kane y musiala. ambos con la primera equipacion del bayern de munich. ambos se están abrazando y con un gesto contento
Harry Kane, opción más asequible | @harrykane

Una necesidad que va más allá del mercado

La urgencia por un nuevo delantero no es solo cuestión de edad o desgaste. El Barça sabe que un equipo competitivo en Europa necesita una referencia ofensiva indiscutible. Sin un goleador de élite, la diferencia con los grandes rivales europeos aumenta temporada tras temporada.

La salida de jóvenes talentos dejó aún más vacío en la parcela ofensiva. Aunque jugadores como Lamine Yamal y Ferran Torres aportan desequilibrio, ninguno tiene todavía la jerarquía de liderar un ataque de talla mundial. La figura de un '9' determinante se antoja imprescindible para aspirar a la Champions.

En los despachos, Joan Laporta y Deco han repetido el mismo mensaje en reuniones privadas. El club quiere un fichaje que ilusione, un movimiento capaz de sacudir el panorama mediático internacional. Y para ello están dispuestos a realizar un esfuerzo económico sin precedentes.

Un jugador de fútbol con uniforme azul se rasca la cabeza mientras está de pie bajo la lluvia en un estadio.
Robert Lewandowski en un entreno | @FCBarcelona

La sombra del ‘fair play’ financiero

El principal obstáculo sigue siendo el de siempre: el límite salarial. El Barça ha trabajado intensamente durante todo el verano para inscribir jugadores y cuadrar sus cuentas. Operaciones como la posible venta de Fermín o la salida de canteranos con opción de recompra forman parte de ese plan.

Aun así, se entiende que una gran inversión en un delantero tendría un efecto colateral positivo. Un fichaje de impacto atraería nuevos patrocinadores, dispararía las ventas de camisetas y reforzaría el valor de la marca Barça. La apuesta, aunque arriesgada, podría convertirse en un círculo virtuoso para la entidad.

Fuentes del club aseguran que la idea no es improvisar ni lanzarse a cualquier operación. Se está diseñando un plan a medio plazo que permita afrontar el fichaje de una superestrella sin hipotecar el futuro. Por eso, las opciones de Kane o Álvarez han quedado en segundo plano.

Joan Laporta hablando ante la prensa
Joan Laporta en una rueda de prensa | @jlaportaoficial

El elegido: un sueño llamado Haaland

El nombre que ha tomado fuerza en los últimos días es el de Erling Haaland. El noruego, que ya es considerado uno de los mejores delanteros del planeta, encaja en todos los parámetros buscados. Juventud, potencia, olfato goleador y una regularidad que le ha permitido destrozar récords en Inglaterra y Europa.

El Barça asume que la operación sería la más cara de su historia. Se calcula que el traspaso podría superar los 100 millones de euros, a los que habría que añadir una ficha astronómica. Sin embargo, dentro de la directiva existe la convicción de que un movimiento así devolvería al club a la élite continental.

Por ahora, no hay negociación abierta, pero sí contactos iniciales y una estrategia definida para 2026. El club quiere prepararse con tiempo y construir el escenario económico que permita afrontar un fichaje de tal magnitud. En el Camp Nou lo tienen claro: si hay que batir récords, será por un jugador como Haaland.