El FC Barcelona afronta un verano clave. Con Flick al mando, la dirección deportiva ha trazado una hoja de ruta clara: reforzar la plantilla, pero sin perder de vista la urgencia de liberar masa salarial y generar ingresos. Para ello, el club deberá cerrar varias salidas estratégicas, algo indispensable para cumplir con el plan económico y permitir nuevas incorporaciones.
En paralelo, varios clubes europeos ya se han interesado por jugadores del Barça, conscientes del momento de transición que vive el club. Uno de ellos es el PSG, donde Luis Enrique afronta también una reestructuración, especialmente en la portería. No es para menos: el futuro de Gianluigi Donnarumma está en entredicho y podría dejar un vacío que el técnico asturiano no quiere improvisar.
Luis Enrique apunta al Barça
Frente a esta situación, el técnico del Paris Saint-Germain ha empezado a mirar hacia el Camp Nou con un interés particular. Según medios franceses, si Donnarumma termina saliendo —cosa que parece cada vez más probable ante el estancamiento en su renovación—, Luis Enrique ya tiene claro a quién recurrir: Marc-André Ter Stegen. El alemán, a quien dirigió con éxito en el FC Barcelona, es una opción que encaja a la perfección en lo que busca el PSG.
Para el técnico asturiano, el guardameta del Barça no solo sería un fichaje de garantías, sino también una incorporación estratégica con valor simbólico. Con Ter Stegen, reforzaría la portería con un nombre de peso sin necesidad de una gran inversión económica, ya que el Barça estaría dispuesto a negociar su salida para aligerar masa salarial.
Futuro incierto, discusiones en marcha
Desde el Barça no se descarta una venta, especialmente si permite liberar una ficha elevada y generar ingresos. Tanto Deco como Laporta ya valoran otras opciones para la portería —con Szczesny como alternativa y Joan García como titular—, lo que reduce el margen de protagonismo para el alemán. A sus 32 años, Ter Stegen no contempla ser suplente y podría ver con buenos ojos un cambio de aires si se le garantiza un proyecto competitivo en la élite europea.
Para el PSG, su llegada representaría una operación redonda: portero contrastado, sin coste de traspaso elevado y con experiencia al máximo nivel. Por ahora, Ter Stegen no ha tomado ninguna decisión: su predisposición es seguir en el FC Barcelona, donde ha sido uno de los referentes. Sin embargo, la falta de claridad en su rol para el próximo curso podría hacerle replantear su situación si la propuesta del PSG se concreta.