El futuro de Pablo Torre en el FC Barcelona pende de un hilo. A pesar de haber llegado en 2022 como uno de los jóvenes más prometedores del fútbol español, el cántabro no ha logrado consolidarse en el primer equipo azulgrana. Las expectativas que generó su fichaje desde el Racing de Santander contrastan con la realidad actual: minutos escasos, cesiones sin continuidad y un protagonismo cada vez más lejano en el Barça.
Con la llegada de Hansi Flick al banquillo culé, Pablo Torre esperaba una nueva oportunidad para ganarse un sitio en el primer equipo. Pero el técnico alemán ha sido claro con él desde un inicio: no contará con muchas oportunidades. Esa falta de confianza, sumada a una temporada con muy poco protagonismo, ha empujado al mediapunta a replantearse su futuro, y ya tiene varias propuestas sobre la mesa.
Ofertas en fila
Más allá de la postura del jugador, el Barça también tiene claro que es momento de encontrarle una salida, pero sin cerrar la puerta a un posible regreso. Deco, al frente de la dirección deportiva, ya ha iniciado conversaciones con varios clubes interesados en hacerse con el jugador. La intención es clara: evitar una nueva cesión que no le brinde continuidad y cerrar un traspaso con cláusula de recompra.
Y en ese escenario, los pretendientes no faltan. En La Liga, Valencia, Osasuna y Sevilla han preguntado por él, aunque todos priorizan una cesión, algo que el Barça por ahora descarta.
En el extranjero, el Porto aparece como una opción más concreta. El club portugués está dispuesto a negociar una operación con condiciones que permitan al Barça seguir teniendo control sobre el futuro del jugador. Incluso desde Alemania, el Bayer Leverkusen ha mostrado interés, aunque sin formalizar aún una propuesta definitiva.
Una salida, un objetivo
La posición del club es firme: Pablo Torre necesita minutos de calidad y un entorno donde pueda crecer. Por eso, más allá de desprenderse de él, el objetivo es que su desarrollo continúe sin que el Barça lo pierda completamente de vista. Sería una fórmula similar a la utilizada en otros casos recientes, con recompra incluida y seguimiento constante por parte del área deportiva.
Mientras tanto, el futbolista mantiene la calma. Ha pedido centrarse exclusivamente en la selección antes de tomar una decisión, aunque su entorno ya analiza las ofertas que van llegando. A sus 22 años, Pablo Torre sigue siendo una apuesta a futuro, y aunque su camino en el Barça no ha sido el esperado, podría tener un nuevo capítulo como azulgrana.