El FC Barcelona continúa trabajando a contrarreloj para configurar su plantilla de cara a la próxima temporada. Con Hansi Flick al mando, la dirección deportiva tiene como prioridad reforzar al primer equipo con jugadores de alto nivel, pero también resolver los problemas financieros que afectan al club. La situación económica sigue marcando cada movimiento, y cualquier incorporación debe ir acompañada de salidas estratégicas.
El fichaje de Nico Williams por el FC Barcelona finalmente no se llevará a cabo. Aunque su nombre estuvo durante semanas en la agenda del club y su perfil encajaba en los planes de Hansi Flick, la operación no ha prosperado. Ni el interés del jugador ni los intentos de Deco han sido suficientes para cerrar el acuerdo.
Es en este escenario donde se barajan decisiones de gran calado.
Los señalados para salir
Joan Laporta y Deco han tomado una medida que hace apenas unos meses habría parecido impensable. Poner en el mercado a dos de los grandes referentes del vestuario, Marc-André ter Stegen y Ronald Araújo. Ambos han sido piezas clave en las últimas temporadas, pero su situación actual y el nuevo proyecto de Flick han cambiado el contexto.
El portero alemán, capitán del equipo, arrastra desde hace tiempo problemas físicos que han mermado su continuidad. Aunque su calidad bajo palos es incuestionable, en el club temen que no recupere al cien por cien su mejor versión y consideran que es el momento para abrirle la puerta. La reciente llegada de Joan García desde el Espanyol refuerza esta idea, ya que el joven guardameta podría asumir mayor protagonismo en el primer equipo.
En cuanto a Araújo, su rendimiento ha generado dudas en los últimos meses, especialmente en partidos clave de Champions League donde quedó señalado. A sus 26 años, el central uruguayo sigue teniendo un gran cartel en Europa y podría dejar una suma importante en las arcas culés. Flick aprecia sus cualidades, pero la necesidad de cuadrar cuentas podría forzar su salida si llega una oferta convincente.
Doble venta que abriría el mercado
El posible traspaso de Ter Stegen y Araújo tendría un impacto inmediato en las finanzas del club. Entre el dinero ingresado por las ventas y el ahorro en sus altos salarios, el Barça podría ganar el margen necesario para inscribir y activar otras operaciones previstas. Laporta sabe que este tipo de decisiones son delicadas, pero también entiende que son inevitables en el contexto actual de restricción económica.
Además, con estos movimientos se evitaría recurrir a la venta de jóvenes como Fermín López o Marc Casadó, dos futbolistas que el club considera estratégicos para el futuro. La intención es mantener el núcleo de talento joven y rodearlo de fichajes clave para devolver al Barça a la élite europea. Las próximas semanas se presentan decisivas, con negociaciones abiertas y un mercado que aún puede deparar sorpresas en el Camp Nou.