El mandato de Joan Laporta, que volvió a la presidencia en 2021, ha estado marcado por la supervivencia económica y la improvisación. Aun así, parece que se empieza a ver la luz al final del túnel y, a pesar de las pérdidas en el último ejercicio, el Barça volvería a la normalidad salarial.
Lo haría gracias al acuerdo que está cerca de cerrarse con Nike. El gran contrato que se cerrará con la multinacional estadounidense posibilitará el regreso a la norma 1:1 del 'Fair Play' gracias a las grandes cantidades que ingresará el combinado culé.
En total, parece que se ingresarán unos 150 millones por una prima de renovación y unos 100 anualmente como cuota marcada. Cifras que harán que el Barça vuelva a estar en el escaparate mundial y, como espera Laporta, que sea capaz de acometer grandes fichajes en los próximos mercados.
Laporta quiere un golpe de efecto para el próximo verano
En este sentido, el presidente siempre ha sido muy amigo de la ilusión y el positivismo. Sin embargo, la ruina económica que arrastraba el Barça del anterior mandato y los enormes sacrificios que se han tenido que hacer, han dejado a Laporta sin sus característicos fichajes mediáticos.
Solo el verano de las famosas 'palancas' hizo posible algún fichaje estelar como el de Robert Lewandowski. Por eso, ahora, menos de dos años antes de las elecciones que se celebrarán en 2026, el presidente sueña con dar un golpe de efecto que 'calmé' a la competencia.
Para ello, son muchos los pasos que deben darse. Como se ha comentado, cerrar el contrato con Nike, también arreglar el desaguisado de Barça Studios y para salud de la escala salarial, dar salida a algún jugador.
Mejor que Vinicius Júnior: el fichaje 'bomba' que prepara el Barça
Así las cosas, Laporta negociará por una estrella mundial para el próximo verano. Erling Haaland parece ser su favorito, pero no es la única opción. De hecho, otras como Nico Williams, Rafa Leao o Viktor Gyökeres han sido valoradas y puestas encima de la mesa.
Sin embargo, existe una opción que se ha rumoreado en los últimos días y que encajaría perfectamente con lo que quiere el Barça. Neymar Júnior, que está en Arabia, podría regresar.
El brasileño solo tiene 32 años y si volviese al Barça, se le pediría un mínimo de compromiso y dedicación. En este sentido, a Laporta le gustaría, ya que, supondría un gran empuje económico y, a su vez, un gran salto de calidad.