Un jugador de fútbol con cabello rubio aparece frente al escudo del FC Barcelona.

Lamine Yamal lo deja muy claro: 'Si no le fichamos ya no podremos ganar La Champions'

Tras la eliminación en Champions, al fichaje clave para dar el salto definitivo.

El Barça se quedó a un paso de la final.  La derrota ante el Inter en San Siro dolió, y mucho, pero dejó una certeza: hay equipo, hay talento, pero faltan piezas.  Y uno de los primeros en levantar la voz ha sido Lamine Yamal.

El joven canterano, que volvió a brillar en el partido más importante de la temporada, no se escondió.  “Traeremos la Champions a Barcelona”, dijo. Pero para lograrlo, también dejó claro que el club debe moverse en el mercado.

Un fichaje que puede marcar la diferencia

Lamine no dio nombres abiertamente, pero en su entorno hay unanimidad. Si el Barça quiere dar el salto definitivo, necesita sumar desequilibrio por la banda izquierda. Y el nombre que más convence al ‘27’ culé es Nico Williams.

El extremo del Athletic Club ha firmado una temporada de alto nivel. Su desborde, explosividad y carácter lo han consolidado como uno de los grandes talentos de LaLiga. Para Yamal, sería el complemento perfecto.

Un jugador de fútbol con uniforme de entrenamiento negro y logos visibles extiende los brazos en un campo deportivo.
Lamine Yamal en un entrenamiento | @FCBarcelona

Compartir banda con otro jugador vertical y con capacidad de romper defensas permitiría al Barça ganar una dimensión ofensiva nueva. La conexión entre ambos puede ser letal. Y en el vestuario, muchos ven con buenos ojos su llegada.

Lamine tiene claro que el Barça necesita nuevas alternativas arriba. Raphinha ha cumplido, pero su irregularidad en los grandes partidos dejó dudas. Ansu Fati, por su parte, no ha conseguido recuperar su mejor nivel.

Un jugador de fútbol con el uniforme del Athletic Club de Bilbao gesticula con los brazos extendidos durante un partido.
Nico Williams jugando con el Athletic Club | Athletic Club

El club lo valora, pero no se lanza

Por ahora, desde la dirección deportiva no hay negociación abierta con el Athletic Club. La cláusula de Nico Williams sigue rondando los 60 millones de euros, y la situación económica del Barça obliga a medir cada paso.

Sin embargo, tras la eliminación en Champions, el club ha reactivado varias carpetas. Si se concretan salidas importantes este verano, como la de Araújo o algún jugador del medio campo, Nico podría volver a estar en primera línea.

Jugador de fútbol con uniforme azul y rojo en acción durante un partido.
Lamine Yamal en un partido con el Barça | @FCBarcelona

Joan Laporta y Deco han escuchado el mensaje. El vestuario quiere refuerzos, y Flick también. El técnico alemán considera que el equipo necesita más profundidad de banquillo para afrontar una temporada larga y exigente.

Nico gusta por perfil y edad, tiene 22 años, conoce la liga, y su proyección sigue al alza. Además, su entorno ve con buenos ojos un cambio de aires si el Barça formaliza el interés. De hecho, el propio jugador estaría dispuesto a escuchar.

Un jugador de fútbol con cabello rubio corre durante un entrenamiento, vistiendo un uniforme oscuro con detalles en rojo y azul.
Lamine y su cambio de look en el último entrenamiento | @FCBarcelona

Una relación que suma

Lamine y Nico se conocen, se entienden y se admiran. En el pasado, han coincidido en concentraciones con la Selección y su conexión fue inmediata. El vestuario azulgrana necesita más asociaciones naturales como esta.

Yamal quiere ganar, quiere liderar un Barça competitivo.  Pero sabe que para llegar al siguiente nivel, necesita compañeros con los que pueda compartir la responsabilidad ofensiva. Y Nico es su elegido.

Dos futbolistas sonrientes con uniformes de entrenamiento blanco y azul de un equipo patrocinado por Silbö Telecom.
Nico Williams y Lamine Yamal | @rfef

El Barça tiene margen si planifica bien. La clave estará en liberar masa salarial y generar ingresos con alguna venta estratégica. Si eso sucede, el fichaje de Nico Williams será más que una ilusión.

Lamine lo ha dejado claro: no basta con promesas, hay que actuar.  Su apuesta es firme, su ambición no se esconde. Ahora, el balón está en el tejado de la directiva.

¿Escuchará Laporta a su joya más valiosa? El verano será largo… pero el nombre de Nico ya está sobre la mesa.