Hansi Flick ha cambiado muchas cosas en el Barça. El equipo es más dinámico, juega a menos toques y es más vertical. Sin embargo, a pesar de todos estos retoques, el equipo sigue necesitando una figura en una posición, dónde hace tiempo que no hay un especialista.
Es la demarcación de mediocentro, siempre capital en el juego del Barça. Desde bien pequeños, todos los equipos de La Masia se construyen con un pivote como eje central del engranaje y este Barça, hace ya dos años que no invierte ahí.
Igualmente, gracias precisamente a la cantera, el Barça está pudiendo competir gracias a Marc Casadó y a Marc Bernal, en un principio. Ambos juegan de maravilla y demuestran tener un potencial único. Sin embargo, en el club saben que hay que reforzarse, puesto que el único especialista que tiene la plantilla, es ahora mismo una gran incógnita.
De Jong, cada vez más lejos de un futuro en el Barça
El futuro del holandés es incierto. La tensión crece cada día en el seno del club entre él y toda la cúpula directiva. Entre lesiones, no querer operarse, y no contestar a las ofertas de renovación, la paciencia empieza a agotarse en el Barça.
Su contrato finaliza en 2026, por lo que saldría gratis en menos de dos años. Por lo contrario, si el Barça quiere venderlo, su última oportunidad será esta próxima ventana disponible de verano. Sin embargo, el problema es recurrente: De Jong ni contesta ni quiere irse.
El problema, más allá de lo económico y de la inestabilidad que genera, es futbolístico. Frenkie no es un especialista en el pivote, de hecho, muchos creen que ni siquiera lo es. Pero, la realidad ahora mismo es que es el jugador más capaz para jugar ahí con el permiso del gran nivel de Casadó.
El mediocentro con el que se ha reunido Deco
Esto, a su vez, ha provocado que la dirección deportiva del Barça vaya pensando en alternativas por si De Jong dejara el equipo en 2025. De hecho, Deco, la cabeza visible, ya ha puesto el ojo en un jugador que le encaja.
Se trata de Stanislav Lobotka, viejo objetivo del Barça, y jugador de 29 años del Nápoles. Es un especialista de la demarcación y su capacidad para distribuir y organizar ya llamó la atención de Xavi Hernández, que lo quiso.
Según cuentan desde Italia, Deco ya se habría reunido con él algunas veces en Nápoles para trasladarle su interés. Sin embargo, su contrato, que acaba en 2027, y De Laurentiis, que es el presidente napolitano y destaca por ser muy duro, son grandes problemas.