La temporada pasada ha sido la confirmación de que el Barça puede competir al máximo nivel con una plantilla joven. Lamine Yamal, Pau Cubarsí y Alejandro Balde han sido los grandes nombres propios de un Barça rejuvenecido, al mando de Flick. Con todo ello, el equipo hizo una temporada histórica con la conquista del triplete nacional.
Lamine Yamal ha sido una de las grandes sensaciones del fútbol europeo, deslumbrando con su desparpajo en la banda. Cubarsí se ha asentado en la defensa como si llevara años en la élite, mientras que Balde ha recuperado protagonismo y forma física, demostrando que tiene sitio en la élite.
La Masia, pilar de un proyecto sólido y esperanzador
Estos tres nombres no son casualidad. Todos son producto de La Masia, la cantera que tantos éxitos ha traído al Barça. Y no están solos, ya que, en torno a ellos están Gavi, Marc Bernal o Marc Casadó, que están llamados también a ser el motor del club en los próximos años.
En un momento en el que muchos clubes buscan fichajes millonarios, el Barça demuestra que se puede construir un equipo competitivo desde dentro.
No todos llegan
Sin embargo, no todos los jugadores del filial logran dar el salto definitivo al primer equipo. Un caso reciente es el de Noah Darvich. El talentoso centrocampista alemán, que llegó como una promesa con enorme proyección, no ha terminado de consolidarse pese a ser del gusto de Flick.
Darvich ha tenido minutos en el Barça Atlètic, pero no ha terminado de destacar al nivel que se esperaba. La competencia, la presión y la exigencia del club no son fáciles de asumir, y el joven futbolista ha quedado algo rezagado. Por ello, el club ya habría tomado la decisión de dejarle salir.
Destino Stuttgart
Noah Darvich tenía contrato hasta 2026, pero su salida es inminente. Según informan medios alemanes, el futbolista se marchará al Stuttgart en los próximos días. La operación se cerraría por una cantidad baja, una cifra simbólica que refleja que el Barça prefiere liberar espacio y confiar en otros talentos más adaptados al proyecto.
Pese a no triunfar en Barcelona, Darvich sigue siendo un jugador con condiciones. En Alemania lo conocen bien y creen que en un contexto más favorable puede explotar. En el Barça, mientras tanto, continúan centrados en potenciar su cantera y dar oportunidades a los que sí han conseguido destacar.