El Barça no logró cumplir todos sus objetivos en el pasado mercado de fichajes debido a las limitaciones financieras que siguen afectando al club. La directiva tenía la intención de reforzar el equipo en varias posiciones clave, especialmente en el extremo y en el mediocentro defensivo.
Sin embargo, pese a los esfuerzos de Joan Laporta, no fue posible concretar las incorporaciones necesarias para cubrir esas áreas. La situación económica complicó las negociaciones, y al final, el único refuerzo significativo que se pudo concretar fue la llegada de Dani Olmo.
No obstante, la falta de un extremo puro y de un mediocentro defensivo dejó algunos huecos en la plantilla, lo que obliga al Barça a seguir buscando opciones. Eso sí, parece ser que hay una demarcación que se ha caído definitivamente de la lista.
El Barça cambia de prioridades
De cara al próximo mercado de fichajes, las prioridades han cambiado, y el Barça ya no considera imprescindible la incorporación de un mediocentro defensivo. El gran rendimiento de los canteranos Marc Casadó y Marc Bernal ha convencido a Flick de que estos jóvenes talentos pueden ser una solución sólida para el centro del campo.
Casadó y Bernal han demostrado en partidos importantes que tienen la capacidad y el temple para desempeñarse en una posición tan crucial, lo que reduce la necesidad de buscar refuerzos externos.
Así, el enfoque del Barça para el próximo mercado estará en mejorar su defensa y añadir potencia en la delantera. Se buscará un delantero centro, un extremo y un defensa central.
Laporta descarta a un viejo objetivo
En este contexto, según informa 'E-Notícies', el Barça ha descartado finalmente el fichaje de Martín Zubimendi, quien en algún momento fue visto como el sustituto ideal de Busquets.
Zubimendi ha sido valorado como una de las promesas más destacadas en su posición, y su estilo de juego lo acercaba al perfil del Barça. Pero a pesar de ello, la irrupción de Casadó ha cambiado los planes, dejando a Zubimendi fuera de los objetivos.
En este sentido, jugadores como Gavi y Pedri, quienes conocen bien a Zubimendi de la selección española, han mostrado cierta tristeza. Pero, a su vez, están contentos con la decisión. Los jóvenes talentos de la cantera ofrecen una solución a largo plazo que no solo beneficia las finanzas del club, sino que también mantiene el estilo de juego del Barça.