Hace dos temporadas, el FC Barcelona dejó salir a uno de sus jóvenes talentos formados en La Masia. El jugador buscaba minutos y una estabilidad que no encontraba en el Camp Nou. Ahora, su nombre vuelve a sonar con fuerza en los despachos azulgranas.
La decisión de dejarle marchar no fue sencilla, pero se entendió en su momento como necesaria. Las prioridades deportivas eran otras y el espacio en la plantilla era limitado. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que su evolución ha sido notable.

Consolidación lejos del Camp Nou
En su nuevo destino, el futbolista ha explotado todo su potencial. Se ha convertido en una pieza importante en su equipo, alternando posiciones defensivas con solvencia. Su madurez y consistencia lo han llevado a ser uno de los defensores más fiables de LaLiga.
Con minutos, continuidad y confianza, su juego ha crecido de forma evidente. El futbolista ha pulido aspectos tácticos que en Barcelona aún estaban por desarrollar. Su polivalencia se ha revelado como un activo valioso.

La falta de laterales fiables ha sido uno de los grandes problemas del Barça esta temporada. Las lesiones de Balde y los cambios constantes en defensa han expuesto las carencias del equipo. Flick ha sido claro: necesita refuerzos inmediatos en los costados.
Se busca un perfil que combine experiencia en la liga, adaptación rápida y un coste asumible. El mercado no ofrece muchas opciones que cumplan estos requisitos. Por eso, recuperar a un ex de la casa se ha convertido en una alternativa real.

Un perfil ideal para Flick
El jugador en cuestión entiende a la perfección el modelo Barça. Formado en La Masia, sabe lo que se exige en el Camp Nou en cuanto a salida de balón, posicionamiento y presión alta. Además, su crecimiento reciente le permitiría asumir un rol importante desde el primer día.
Su edad también juega a favor. Con 25 años, está en el momento ideal para afrontar el desafío de regresar a un club de máxima exigencia. No necesitaría un proceso de adaptación largo ni perdería tiempo en conocer el estilo de juego.

Una operación viable económicamente
Desde el club propietario no pondrían grandes obstáculos a su salida si llega una oferta razonable. Su precio de mercado es asumible para el Barça actual, que busca reforzarse sin comprometer la estabilidad financiera. Deco ya explora las condiciones del traspaso.
Laporta valora positivamente la operación. Incorporar un canterano con experiencia, margen de mejora y conocimiento del club encaja en la política de reconstrucción joven que se está aplicando. Todo depende ahora de cerrar los números.

Después de meses de análisis, el nombre que ha vuelto a poner de acuerdo a técnicos y directiva es el de Óscar Mingueza. Tras brillar en el Celta de Vigo, el defensa catalán está en el punto de mira del Barça para reforzar una de sus posiciones más urgentes. Su regreso podría cerrarse en las próximas semanas.