El mercado de verano se acerca y empiezan a activarse movimientos importantes. Desde Francia llega el rumor de que una de las figuras emergentes del fútbol europeo estudia un cambio de aires. Su situación actual en su club ha cambiado de forma drástica en los últimos meses.
El futbolista empezó la temporada liderando la ofensiva de su equipo tras la marcha de su gran estrella al Real Madrid. Sus actuaciones lo colocaron como uno de los jugadores más prometedores del continente. Sin embargo, nuevos fichajes y la competencia interna han alterado completamente su panorama.

Competencia feroz en el Paris Saint-Germain
La llegada de un extremo georgiano o en el mercado invernal y la irrupción de dos jóvenes figuras han relegado al delantero a un rol mucho más secundario. A pesar de sus buenos registros de goles y asistencias, no ha logrado recuperar un puesto fijo en el once. Su entrenador apuesta por un tridente ofensivo en el que ya no tiene cabida.
Cada vez que salta al terreno de juego, demuestra su calidad técnica y potencia física. Pero la falta de continuidad empieza a pesar. El jugador, con apenas 22 años, no quiere seguir viendo limitada su progresión.

Ante esta situación, el internacional francés ha comunicado a la directiva su voluntad de salir en verano si no cambia el escenario. Su agente, conocido por manejar operaciones de alto nivel, ya se ha movido para explorar opciones. La noticia no ha tardado en llegar a los grandes clubes del continente.
Su juventud, su talento y su capacidad de adaptación lo convierten en un caramelo para los proyectos ambiciosos. Varias entidades ya han sondeado la posibilidad de incorporarlo. Y entre ellas, un histórico de LaLiga ha reaccionado con rapidez.

El Barça entra en escena
El representante del jugador ha mantenido contactos directos con la cúpula deportiva del Barça. Joan Laporta y Deco han sido informados del interés y de la disponibilidad del futbolista para cambiar de aires. El proyecto deportivo del Camp Nou podría ser el destino ideal para relanzar su carrera.
El nuevo entrenador azulgrana ve con buenos ojos su fichaje para fortalecer las opciones en ataque. Considera que puede ser un complemento ideal para el esquema, especialmente como alternativa en los costados. Las primeras conversaciones han dejado una sensación positiva en ambas partes.

Un fichaje que no será sencillo
El club propietario del futbolista no piensa ponerlo fácil. Aunque el delantero no es titular indiscutible, sigue siendo considerado una pieza importante para el futuro. Además, el montante de la operación no será bajo.
En su momento, el club parisino desembolsó una cifra importante por su fichaje. Ahora, para dejarlo salir, no aceptarán menos de 80 millones de euros. Será una negociación larga y complicada.
El Barça sigue analizando la viabilidad de la operación antes de dar el siguiente paso. La necesidad de reforzar su ataque, la juventud del futbolista y su margen de mejora juegan a su favor. Pero las dificultades económicas obligarán a gestionar con inteligencia cada movimiento.
Hoy, lo que parecía un sueño empieza a tomar forma en los despachos del Camp Nou. Bradley Barcola, la joven perla del Paris Saint-Germain, está en conversaciones para convertirse en el próximo refuerzo de la delantera azulgrana.