Ansu Fati fue el gran protagonista en la victoria del FC Barcelona sobre el Mallorca el pasado martes. Titular por primera vez en meses, dejó destellos de la calidad que le convirtió en la gran promesa culé. El estadio respondió con una ovación cada vez que tocaba el balón.
Hansi Flick apostó por las rotaciones pensando en los retos inmediatos. La final de Copa del Rey y las semifinales de Champions obligaban a dar descanso a los titulares habituales. Era el momento perfecto para que Ansu recuperara sensaciones.

Un partido igualado decidido tras el descanso
El duelo ante el Mallorca no fue sencillo para los de Flick. Al descanso se llegó con empate sin goles, en un partido donde las ocasiones se repartieron. El Barça dominó la posesión, pero sin encontrar el camino al gol.
Nada más empezar la segunda parte, Dani Olmo aprovechó un rechace para firmar el 1-0. A partir de ahí, el Barça manejó el encuentro con solvencia. Y Ansu se encargó de mantener viva la ilusión en la grada.

Pese a su gran actuación, el futuro de Ansu Fati estaba decidido desde hace tiempo. Flick ya le había comunicado que no contaba con él para el próximo proyecto. Y el jugador, tras meses de reflexión, ha terminado por aceptar su salida.
Su participación ante el Mallorca puede haber sido su último partido como local vestido de azulgrana. La afición lo despidió con cariño, sabiendo que difícilmente volverán a verlo en el Camp Nou. Ansu se marcha dejando una huella que, pese a todo, sigue siendo especial.

Una salida necesaria para todas las partes
En el Barça consideran que su venta es imprescindible para seguir con el proceso de renovación. Ansu es uno de los salarios más altos de la plantilla y su continuidad no tendría sentido sin minutos. Para el jugador, seguir en el banquillo tampoco era una opción viable.
Durante meses se resistió a aceptar su salida. Quería triunfar en el club que le vio crecer y le dio la oportunidad de ser el heredero del '10'. Sin embargo, la falta de protagonismo y las necesidades deportivas del Barça han precipitado el desenlace.

Se barajaron diferentes opciones en el extranjero, incluyendo ofertas de ligas emergentes. Sin embargo, Ansu ha decidido seguir compitiendo en LaLiga. Cree que necesita estabilidad y continuidad para recuperar su mejor nivel.
El FC Barcelona y el futbolista ya tienen un acuerdo cerrado con su próximo destino. Ansu Fati jugará en el Sevilla a partir de la próxima temporada, buscando relanzar su carrera en un equipo que apuesta fuerte por su talento.