La dirección deportiva del FC Barcelona encara un verano decisivo en el que deberá tomar decisiones clave en todas las líneas, incluida la defensa. A pesar de haber sido uno de los líderes en las últimas temporadas, Ronald Araújo ha visto como su rol en el equipo que se ha ido diluyendo. Todo ello en los últimos meses, especialmente con la consolidación de Hansi Flick en el banquillo del primer equipo culé.
La titularidad del zaguero uruguayo ya no es indiscutible, y la competencia interna ha aumentado con fuerza en la reciente temporada. La irrupción de Pau Cubarsí, la experiencia de Iñigo Martínez, la recuperación de Christensen y la vuelta de Eric García abren un escenario distinto en la zaga defensiva. Y Hansi Flick, frente a este panorama, ha buscado nuevas fórmulas y variantes para fortalecer al Barça desde las primeras líneas del campo.
El mercado vuelve a la carga
Araújo, que tuvo una temporada con altibajos, sigue siendo un futbolista valioso, pero ha perdido parte del estatus de intocable que tuvo en el pasado. En ese contexto de dudas, la Juventus ha vuelto a la carga para intentar fichar al central uruguayo. El club de Italia ya mostró interés durante el pasado mercado invernal, y ahora, con su clasificación a la próxima Champions League, ha retomado el contacto con fuerza.
En la Juventus ven en Araújo al líder defensivo ideal para su nuevo proyecto y están dispuestos a presentar una propuesta formal. Por otro lado, desde el entorno del jugador no cierran la puerta a un posible cambio de aires. Aunque el uruguayo está comprometido con el club azulgrana, también es consciente de que su protagonismo ya no es el mismo.
Decisión en camino
En caso de que el Barça no le garantice continuidad y un rol fijo, una aventura en la Serie A, que históricamente potencia a los defensores, no sería mal recibida. En el club catalán, por su parte, no considera a Araújo intransferible: si bien no planean regalarlo, escucharían ofertas que se acerquen a los 60 millones de euros. No es para menos, pues esa cifra permitiría aligerar la presión del 'fair play' financiero y facilitar nuevas incorporaciones, sobre todo en el frente ofensivo.
La posible venta del uruguayo se estudia como parte de una estrategia más amplia para equilibrar la plantilla y mejorar la salud económica del club. Flick, aunque valora sus cualidades, no pondría obstáculos si se dieran las condiciones adecuadas. El técnico alemán ya trabaja con varias alternativas en defensa y cree que el Barça podría sobrevivir a la salida del central sin romper la solidez del bloque.