Ansu Fati llegó al FC Barcelona como uno de los talentos más prometedores de La Masía. Sus primeras actuaciones en el primer equipo lo colocaron como un posible heredero de Lionel Messi. Tanto por su habilidad como por el impacto que generó en sus inicios.
Sin embargo, el paso del tiempo, las lesiones y la falta de continuidad han cambiado el rumbo de su carrera en el club azulgrana.
El declive de una estrella
En sus primeros meses con el primer equipo, Ansu Fati maravilló al mundo. Con tan solo 16 años, rompió récords y mostró una calidad que lo proyectaba como una futura estrella.
Sin embargo, las lesiones empezaron a ser un obstáculo en su desarrollo. Su rendimiento nunca volvió a ser el mismo, y la competencia en el Barça le ha relegado a un papel cada vez más secundario.
Hansi Flick intentó darle confianza durante la pretemporada, pero no logró devolverle el protagonismo. En muchos encuentros, Ansu Fati ni siquiera ha sido considerado como opción desde el banquillo, lo que ha hecho evidente que su etapa en el Barça está llegando a su fin.
La decisión de Joan Laporta y Deco
La complicada situación económica del FC Barcelona ha llevado a tomar decisiones drásticas. Entre ellas, la necesidad de vender a algunos jugadores para equilibrar las cuentas y liberar espacio en la plantilla. Ansu Fati, con poco protagonismo y una proyección incierta en el equipo, ha sido señalado como uno de los jugadores cuya venta es prioritaria.
Deco y Joan Laporta ya han establecido el precio de salida del joven extremo: 25 millones de euros. Aunque inicialmente se hablaba de una cifra menor, la directiva ha decidido elevar sus pretensiones, conscientes del interés que el jugador genera en otros clubes.
El Sevilla es el equipo que más ha sonado como destino para Ansu Fati. El club andaluz ve en el jugador una oportunidad para reforzar su ataque y recuperar a un futbolista que aún tiene mucho potencial por desarrollar. Sin embargo, la situación financiera del Sevilla podría complicar la operación.
Pagar 25 millones de euros no es una opción viable para el equipo sevillista en este momento, por lo que una cesión con opción de compra es la alternativa más probable. Este movimiento permitiría a Ansu tener los minutos que necesita para recuperar su confianza y demostrar que todavía puede brillar en la élite.
Un futuro lejos del Camp Nou
Aunque el Sevilla es el destino más mencionado, no se descarta que otros clubes europeos se interesen por Ansu Fati. A sus 21 años, el jugador tiene margen para recuperar su nivel y construir una carrera exitosa fuera del FC Barcelona.
El Barça, por su parte, busca cerrar la operación cuanto antes para enfocar sus recursos en otros fichajes y en la inscripción de jugadores como Dani Olmo y Pau Víctor. La venta de Ansu podría ser clave para aliviar las tensiones económicas y abrir un nuevo capítulo tanto para el jugador como para el equipo.
El futuro de Ansu Fati parece estar decidido. Aunque fue una de las mayores esperanzas del club en sus inicios, el tiempo ha mostrado que su ciclo ha llegado a su fin. Con el precio fijado y la voluntad del jugador de recuperar su nivel, su salida es inminente.