Frenkie De Jong no está atravesando su mejor etapa en el Barça desde que llegó al primer equipo del club. Pese a ser uno de los capitanes y jugadores más talentosos de la plantilla, su rendimiento está muy lejos de lo que se espera en la entidad catalana. Frente a ese panorama, el centrocampista neerlandés está comenzando a perder la paciencia.
Las últimas informaciones que han circulado en el entorno del FC Barcelona aseguran que la situación entre Frenkie De Jong y Hansi Flick se estaría volviendo prácticamente insostenible. 'El Nacional' menciona que el futbolista de 27 años está frustrado por no contar con los minutos que esperaba y cree que el técnico alemán no confía lo suficiente en él. Así, el medio en cuestión señala que Frenkie De Jong ha tomado una postura definitiva: o la dirección deportiva encuentra una solución inmediata o habrá problemas para el club culé.
Cambio radical en su futuro
Desde que fichó por el Barça en 2019, Frenkie De Jong ha sido uno de los jugadores llamados a ser 'referentes' del equipo culé en un futuro cercano. Sin embargo, han pasado los años y el centrocampista neerlandés no se ha terminado de consolidar como tal. Ahora, bajo la dirección de Hansi Flick, la situación no apunta a ser diferente para él sino todo lo contrario.
Desde que Flick llegó al banquillo, De Jong ha perdido protagonismo en el esquema y ha visto que jugadores como Marc Casadó se le han adelantado en el once culé. Es evidente que a día de hoy son otros los jugadores que son 'referencia' en el centro del campo y el exjugador del Ajax ha quedado relegado a un papel secundario. La situación ha llegado al límite para Frenkie, quien le habría trasladado a la dirección deportiva su incomodidad.
Rampa de salida
A pesar de su indiscutible calidad, parece que el estilo de juego de Frenkie De Jong no encaja con las ideas del técnico alemán. En ese sentido, la salida del centrocampista neerlandés empieza a ser una opción real aunque, evidentemente, no será sencilla. Las últimas informaciones de 'El Nacional' apuntan a que su elevado salario, uno de los más altos de la plantilla, complica la llegada de ofertas.
El medio en cuestión asegura que hasta ahora no han llegado clubes que hayan mostrado un interés firme en asumir las condiciones económicas del jugador. Consecuentemente, esto pone al Barça en una posición complicada considerando que el contrato del neerlandés culmina en 2026. Dejarle salir sin recibir una compensación económica significativa sería un golpe para las arcas del club.