Hans-Dieter Flick ha tomado las riendas del FC Barcelona con mano firme, pero algunas de sus decisiones están generando controversia dentro del vestuario. En especial, su manejo de la portería no ha sentado bien entre algunos jugadores. Algunos consideran que el técnico alemán está priorizando a un guardameta por encima de lo que dicta el rendimiento sobre el campo.
Las elecciones del entrenador han sorprendido a más de uno en la Ciudad Condal, Flick ha demostrado ser un técnico con ideas muy marcadas. Aunque algunos futbolistas y miembros del cuerpo técnico creen que sus decisiones no siempre responden a criterios puramente deportivos. Esta situación ha generado incomodidad dentro del grupo, que empieza a cuestionar si todos los jugadores están teniendo las mismas oportunidades.
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Uno de los puntos de mayor fricción ha sido la difícil gestión de los minutos en la portería, a pesar de que muchos esperaban una competencia más abierta. Es el entrenador quien ha dejado claro que tiene un favorito, algo que ha generado malestar en un sector del vestuario. La plantilla esperaba un reparto más equitativo de oportunidades, sobre todo después del esfuerzo realizado por ciertos jugadores en momentos clave de la temporada.
El castigo de Flick
El caso que más ha dolido dentro del equipo es el de Iñaki Peña, el guardameta español ha sido fundamental para el Barça en los meses más difíciles de la temporada. Cuando Ter Stegen estuvo de baja, su rendimiento ha sido notable, e incluso se le ha señalado como importante por sus propios compañeros. Pero una falta de indisciplina ha cambiado todo y el alemán en ese sentido lo tiene claro, nadie está por encima de los códigos internos de su vestuario.
La decisión del entrenador de apostar firmemente por Wojciech Szczęsny ha sido interpretada como un veto a Peña. El polaco, que llegó en el pasado mercado de invierno, se ha convertido en la opción predilecta del técnico alemán sin margen para la rotación. Esto ha causado sorpresa y descontento en la plantilla, que esperaba que Peña siguiera teniendo protagonismo tras su gran desempeño.
Ter Stegen apura su vuelta
Por el momento, Flick se mantiene firme en su postura y no parece dispuesto a cambiar de opinión. No importa la presión interna que pueda haber en el vestuario, el entrenador alemán tiene claro su plan y seguirá adelante con él. La tensión dentro del equipo sigue en aumento, y si los resultados no acompañan, la polémica sobre la portería del Barça podría convertirse en un problema mayor para el club.
Por si fuera poco para Iñaki Peña, Marc Andre Ter-Stegen cada día se encuentra mejor y prepara su regreso para final de temporada. Puede que sea la mejor noticia para los azulgranas, ya que el portero titular es muy necesario en el equipo. Hasta entonces habrá que ver si Flick da el brazo a torcer con Iñaki Peña o por el contrario, sigue contando con Wojciech Szczesny como en los últimos seis partidos.