Una operación avanzada, con acuerdo económico y respaldo deportivo, se ha venido abajo de manera insólita. Y el motivo no está en la otra parte, sino dentro del propio vestuario culé.
La dirección deportiva, con Deco al frente, había cerrado casi todos los detalles de un refuerzo importante para la plantilla. La operación era considerada estratégica, tanto por perfil técnico como por oportunidad de mercado. Sin embargo, en las últimas 48 horas, todo se ha frenado… y el culpable tiene nombre propio.
Deco | @FCBarcelona_es
Lamine no lo quiere en su banda
Lamine Yamal ha transmitido su disconformidad con la llegada del futbolista, cuestionando su encaje en la banda derecha. Aunque no ha sido una oposición pública ni directa, su mensaje al club ha sido claro: prefiere otro tipo de compañero por su carril. Este gesto ha pesado más de lo que nadie imaginaba.
Hansi Flick había aprobado la incorporación, pensando en darle más variantes al once y soluciones en rotación. No obstante, tras conocer la postura del joven extremo, decidió no forzar una convivencia forzada. Cree que la armonía del vestuario es prioritaria, sobre todo cuando se trata de su estrella en crecimiento.
Lamine Yamal en un entrenamiento | @FCBarcelona
Lamine considera que necesita un acompañante de corte más defensivo, que no condicione su libertad con balón. Su entorno habría sugerido opciones como Héctor Fort o incluso Jules Koundé, ambos más compatibles con su estilo. Esta preferencia ha cambiado por completo la hoja de ruta de la dirección técnica.
El jugador en cuestión ya tenía fecha para viajar a Barcelona y someterse a la revisión médica. Incluso se había reservado una presentación discreta, sin grandes aspavientos, como parte de una planificación centrada en lo deportivo. Pero en el último momento, el Barça decidió levantar el pie del acelerador.
Héctor Fort | @FCBarcelona
De fichaje cerrado a salida definitiva
Esa pausa provocó incomodidad en el entorno del jugador, que no esperaba dudas tan cerca del cierre. Su respuesta fue inmediata: comenzó a escuchar otras ofertas que llegaban desde fuera de España. Y una de ellas convenció tanto por proyecto deportivo como por compromiso total con su protagonismo.
En las últimas horas se ha hecho oficial su fichaje por un gigante europeo, rival directo del FC Barcelona. El jugador ha firmado hasta 2030 y ha sido presentado como pieza clave de su nuevo equipo. Desde la Ciudad Condal, la sensación es de oportunidad perdida, con cierto sabor amargo por cómo se gestionó.
Koundé y Lamine Yamal | @FCBarcelona
Nadie en el club señala directamente a Lamine, pero varias fuentes internas reconocen que su veto pesó muchísimo. Su creciente influencia empieza a marcar algunas decisiones clave del modelo, tanto en fichajes como en estructura táctica. La directiva lo considera inevitable dado su estatus, pero también arriesgado.
Algunos sectores del vestuario ya han expresado su sorpresa por esta dinámica, que prioriza la comodidad de un jugador. Aunque nadie discute el talento de Lamine, varios veteranos creen que no debería tener tanto poder tan pronto. Flick lo sabe y por ahora gestiona con tacto, pero con ciertas reservas.
El jugador que ha elegido al Real Madrid en lugar del Barça no es otro que Alejandro Grimaldo. El lateral izquierdo, ex de La Masía, vuelve a España, pero lo hace para vestir de blanco. Todo por no encajar con los gustos de una estrella de 17 años que ya decide más de lo que parece.