El FC Barcelona se mueve entre planes de futuro y necesidades urgentes. Con el mercado veraniego cada vez más cerca, la dirección deportiva trabaja en entradas pero también en salidas. Una de ellas podría acabar en la MLS, empujada por dos viejos conocidos.
El club tiene claro que para poder fichar, antes debe vender. La norma 1:1 de La Liga obliga a cuadrar ingresos y gastos si se quiere hacer un gran movimiento. Por eso, desde los despachos se analizan opciones para generar margen financiero.

El '9' que desea Flick, pero que necesita sacrificios
El objetivo es traer a un ‘9’ top. La lista de Deco incluye nombres de alto nivel: Viktor Gyökeres, Alexander Isak, Luis Díaz o Nico Williams. Pero todos ellos requieren una inversión importante.
Hansi Flick ha dejado claro que quiere reforzar la línea ofensiva. El alemán busca desequilibrio, físico y regularidad. Sin embargo, para responder a sus deseos, el club necesita liberar masa salarial de inmediato.

Las posibles salidas empiezan a tomar forma. Ansu Fati es uno de los señalados. Andreas Christensen también podría entrar en alguna operación, pero no es el único.
Otros jugadores con mayor valor de mercado también podrían abandonar el Camp Nou. Es la única forma de aspirar a una incorporación galáctica sin romper el equilibrio económico. Y en medio de esta coyuntura, ha aparecido un actor inesperado.

El Inter de Miami mueve ficha con Messi y Suárez al frente
El Inter de Miami vuelve a escena. Tras fichar a Busquets, Alba y Suárez, el club estadounidense quiere más. David Beckham lidera el proyecto, pero esta vez hay otras figuras influyentes detrás del movimiento.
Messi y Suárez actúan como intermediarios. Ambos ya han convencido a varios cracks para mudarse a Florida. Ahora tienen en el punto de mira a un jugador que conocen bien y con quien han compartido vestuario.

El vestuario del Barça empieza a mirar con atención lo que ocurre en la MLS. Las comodidades del entorno, la estabilidad del calendario y la presencia de Messi son factores cada vez más atractivos. Y más aún cuando uno de los mejores amigos del jugador ha tomado partido.
En el club azulgrana ya hay rumores internos. Se sabe que uno de los intocables de la plantilla ha recibido mensajes constantes en las últimas semanas. Desde Estados Unidos lo quieren ya.

El objetivo que puede dinamitar el mercado
Flick no quiere perderlo. Es una pieza importante en su esquema defensivo. Pero si llega una oferta seria, y el jugador da el paso, la operación no sería descartada por la dirección deportiva.
A nivel económico, su venta sería una gran ayuda. Tiene contrato largo y buen cartel. En un mercado limitado, su traspaso podría acercar al Barça a su ansiado fichaje estrella.
El entorno del jugador se mantiene en silencio. Por ahora, no hay señales públicas de ruptura. Pero en el Camp Nou ya se preparan para todos los escenarios posibles.

El futbolista al que Messi y Suárez quieren llevar a la MLS no es otro que Ronald Araujo. El central uruguayo tiene contrato hasta 2031, pero su cláusula de 65 millones lo convierte en una oportunidad única. Y aunque su prioridad sigue siendo Europa, la presión de sus amigos podría cambiarlo todo.
Si el Barça lo pierde, no será solo una baja deportiva. Será también la llave para cerrar el gran fichaje ofensivo del verano.