Hansi Flick ha cerrado su primera temporada al frente del FC Barcelona con un balance inmejorable. Con el triplete nacional —Liga, Copa y Supercopa— en el bolsillo, el técnico germano ha convencido a directiva, vestuario y afición. Su continuidad es un hecho, y se anunciará en breve la ampliación de su contrato hasta 2027.
Pero el entrenador no quiere dormirse en los laureles. Con la temporada ya finalizada oficialmente, ha solicitado a Deco una serie de refuerzos clave para la próxima campaña. Y hay un nombre que ha vuelto a colocarse en el centro de la planificación deportiva: un central de nivel que parecía perdido, pero que aún no ha cerrado su futuro.
Joan Laporta en una rueda de prensa | @jlaportaoficial
El Bayern parecía tenerlo hecho
En Alemania daban por hecho su fichaje por el Bayern de Múnich, incluso se hablaba de un acuerdo cerrado. Sin embargo, el jugador no ha estampado su firma en ningún contrato y mantiene la puerta abierta al Barça. La razón es clara: prioriza jugar en LaLiga y desea probar una nueva etapa fuera de su país.
El entorno del jugador reconoce que, pese al avance con el Bayern, aún no hay nada definitivo. Desde el Camp Nou se mantienen en contacto constante, aunque sin poder formalizar una oferta mientras no se resuelvan los problemas con el fair play. Flick, consciente de esta limitación, ha pedido al club que acelere las gestiones.
Hansi Flick | @FCBarcelona
El futbolista, aún sin dar un ultimátum, ha pedido claridad en los plazos. Quiere resolver su futuro cuanto antes, aunque está dispuesto a esperar un poco más por el Barça. Sabe que necesita garantías contractuales, pero también valora el interés firme del técnico azulgrana, con quien ha trabajado anteriormente.
Mientras tanto, desde Alemania aseguran que el Bayern ya tiene todo preparado para anunciar su fichaje. Sin embargo, la insistencia de Flick y la voluntad del jugador mantienen viva la posibilidad de un giro inesperado. Una especie de ‘robo’ estratégico que alteraría el equilibrio entre dos gigantes europeos.
Deco | FC Barcelona
Un fichaje condicionado por otra salida
Pero la llegada del defensa también depende de otro factor clave: la situación de Ronald Araújo. El central uruguayo tiene contrato hasta 2031, pero con una cláusula de salida de 60 millones de euros. Varios clubes siguen de cerca su caso, y su continuidad no está garantizada.
Flick no lo considera intocable, y Deco tampoco lo ve imprescindible para el futuro. Si finalmente llega una oferta importante, el Barça podría darle salida para aliviar masa salarial y financiar nuevas incorporaciones. En ese escenario, el defensor que desea el técnico alemán se convertiría en su relevo natural.
Pau Cubarsí | @FCBarcelona
El jugador al que Flick quiere a toda costa es Jonathan Tah. El internacional alemán es del total agrado del entrenador por su experiencia, físico y capacidad para liderar desde atrás. Conoce su estilo, su exigencia táctica y su forma de gestionar el vestuario.
Tah también ha expresado su deseo de jugar en España. Ve con buenos ojos la posibilidad de liderar una zaga en reconstrucción, rodeado de jóvenes talentos como Pau Cubarsí o Eric García. Su llegada reforzaría un área que ha sufrido lesiones e irregularidad durante toda la temporada.
El Barça, obligado a actuar con rapidez
La situación es clara: el Barça tiene una oportunidad histórica para hacerse con un central contrastado y todavía en plenitud. Pero también sabe que no tiene mucho margen para maniobrar. La prioridad sigue siendo cuadrar el fair play financiero y dar salida a jugadores con fichas elevadas.
Flick ha sido claro con Deco: o se reactiva la operación de inmediato o se perderá una ocasión única. Jonathan Tah no esperará indefinidamente, y el Bayern sigue presionando para cerrar su incorporación cuanto antes.
Jonathan Tah es el primer gran objetivo de Hansi Flick para reforzar su Barça de cara a la próxima temporada. Un jugador con jerarquía, físico y experiencia, que está dispuesto a elegir el Camp Nou antes que el Allianz Arena. Pero todo depende de que el club azulgrana resuelva rápido sus problemas económicos.
La presión crece, el tiempo corre, y el técnico alemán no quiere dejar pasar una oportunidad que considera crucial. Si el Barça mueve ficha a tiempo, podrá cerrar un fichaje estratégico. Si no, el Bayern volverá a salir ganando.
