Un jugador de fútbol con expresión seria aparece en primer plano junto al escudo del Chelsea sobre un fondo rosa

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El fichaje del inglés cierra la puerta a una operación que había ilusionado a parte del club

La llegada de Marcus Rashford al FC Barcelona ha supuesto un giro de guion inesperado en los planes del club. Aunque la operación se ha cerrado en condiciones muy favorables, no todos celebran su incorporación. En los despachos, saben que este fichaje ha tenido un efecto colateral difícil de digerir.

El Barça necesitaba reforzar el ataque sin comprometer su frágil límite salarial. Por eso, la cesión del internacional inglés desde el Manchester United ha sido vista como una oportunidad estratégica. El club asumirá solo el 70% de su ficha, sin pagar traspaso inicial y con opción de desvincularse a final de temporada.

Sin embargo, la llegada de Rashford ha obligado a descartar otras operaciones en marcha. En especial, una que ilusionaba tanto a la afición como a la dirección deportiva. Se trataba de un futbolista joven, de gran proyección, que además conoce bien la casa.

Una decisión que afecta al futuro inmediato

Hansi Flick priorizó incorporar a un jugador contrastado que pudiera aportar desde el primer día. Marcus Rashford ofrece experiencia, desborde, gol y un perfil polivalente que encaja perfectamente en su idea de juego. El técnico alemán quería garantías, y el club le ha respondido con rapidez.

Pero el movimiento no ha salido gratis. Con el margen salarial ya al límite, la dirección deportiva ha tenido que frenar otras operaciones importantes. El cuerpo técnico ha entendido que era necesario priorizar, aunque ha lamentado la imposibilidad de acometer más fichajes de peso.

La dirección deportiva ya lo tenía todo preparado para lanzarse a por uno de los jóvenes más codiciados del momento. Un talento que ha brillado en la Bundesliga y que estaba en la lista de varios grandes de Europa. De hecho, todo apuntaba a que el Barça tenía una opción real sobre la mesa.

Un hombre gesticula mientras habla en un evento deportivo, con dos personas en el fondo.
Hansi Flick | @FCBarcelona

El Chelsea reacciona y se adelanta

El problema ha sido que otros clubes no han esperado. En Inglaterra, el Chelsea ha estado atento a cada movimiento y no ha tardado en actuar. Con el Barça descartado de la carrera, los blues se han quedado con vía libre para ejecutar el fichaje.

Desde Londres han puesto sobre la mesa una oferta cercana a los 70 millones de euros. Su entrenador quería un perfil joven, ofensivo y con capacidad para marcar diferencias desde la mediapunta. Y el jugador en cuestión cumplía todos los requisitos.

El acuerdo con su actual club ya está cerrado y solo falta el reconocimiento médico. En el entorno del futbolista aseguran que está muy ilusionado con esta nueva etapa. Considera que ha llegado el momento de dar un salto definitivo en su carrera profesional.

Un viejo conocido que no volverá

Con solo 22 años, el protagonista de esta historia ha firmado una temporada sensacional en Alemania. Ha marcado once goles y repartido ocho asistencias en treinta y tres partidos oficiales. Su polivalencia y madurez han llamado la atención de todos los grandes de Europa.

El Barça lo tenía muy bien estudiado. Era un perfil que encajaba tanto por calidad como por su pasado en el club. Se llegó a tantear su regreso, y las conversaciones existieron, aunque nunca llegaron a concretarse del todo.

Jugador de fútbol celebrando con los brazos extendidos en un estadio iluminado.
Xavi Simons | @xavisimons

El jugador, formado en La Masía y con pasado en París, había valorado volver a casa. Pero las condiciones económicas y el fichaje de Rashford han bloqueado completamente su vuelta. Finalmente, ha elegido el proyecto del Chelsea para continuar su ascenso.

Se trata de Xavi Simons, una de las grandes joyas del fútbol neerlandés. El Barça lo tuvo cerca, pero esta vez se le escapó. La apuesta ha sido por Rashford, y el Chelsea ha ganado una batalla inesperada.