El FC Barcelona tiene claro que necesita reforzar su delantera de cara a la próxima temporada. La idea es encontrar un sustituto de garantías para Robert Lewandowski, que encara la recta final de su carrera. En este escenario, Julián Álvarez se ha convertido en el gran deseo de la dirección deportiva.
La apuesta por el delantero argentino responde a su capacidad para adaptarse a distintas posiciones ofensivas. Su juventud, movilidad y eficacia ante el gol lo convierten en el perfil ideal para el sistema que quiere implantar Flick en el nuevo Barça.

Una operación de alto nivel
Sabiendo que la cláusula de rescisión de Julián Álvarez ronda los 100 millones de euros, el Barça ha empezado a diseñar una operación compleja. El objetivo es reducir el coste del traspaso mediante la inclusión de varios futbolistas como moneda de cambio. No se trataría solo de ofrecer dinero, sino también activos deportivos que puedan interesar al Atlético.
Clément Lenglet es la primera pieza que el Barça ha puesto sobre la mesa. El central francés, cedido esta temporada al Atlético, ha dejado buenas sensaciones y Simeone valora positivamente su continuidad en el equipo.
Además de Lenglet, el Barça también ha ofrecido otras alternativas para abaratar el fichaje. Andreas Christensen, Fermín López y Ansu Fati son los otros tres jugadores que podrían entrar en el intercambio. Cada uno de ellos responde a necesidades diferentes que el Atlético podría tener en su plantilla.
La inclusión de estos nombres permite al Barça presentar una propuesta mucho más atractiva. Con ello, se pretende reducir significativamente la cifra económica a desembolsar, acercando la operación a parámetros más asumibles para las finanzas azulgranas.

Un intercambio complicado, pero posible
Tasar a Lenglet en unos 15-20 millones de euros era el primer paso para ajustar cifras. Sin embargo, si el Atlético acepta sumar a Christensen, Fermín o Ansu en la operación, el traspaso de Julián Álvarez podría cerrarse sin un gran desembolso adicional. Todo dependerá de la valoración final que haga el conjunto rojiblanco de los jugadores ofrecidos.
El Barça no descarta incluir también porcentajes de futuras ventas o cláusulas de incentivos para acabar de convencer a los dirigentes colchoneros. La prioridad es cerrar el acuerdo antes de que otros grandes clubes europeos entren en la puja.

La postura del Atlético y de Julián Álvarez
Desde el Atlético de Madrid saben que Julián Álvarez es una pieza clave de su proyecto deportivo. Su rendimiento ha sido excelente desde su llegada y su conexión con la afición ha sido inmediata. No obstante, si la oferta del Barça es lo suficientemente potente, no se descarta que el club se siente a negociar.
Por su parte, el propio Julián Álvarez no vería con malos ojos un cambio de aires hacia el Camp Nou. Consciente de que podría convertirse en uno de los referentes del nuevo proyecto de Hansi Flick , el delantero argentino estaría abierto a escuchar la propuesta azulgrana.
La intención del Barça es avanzar las negociaciones antes de la apertura oficial del mercado de fichajes. La prioridad absoluta es asegurar cuanto antes la llegada de un delantero joven, con experiencia internacional y capacidad goleadora contrastada.
El acuerdo todavía no está cerrado, pero las conversaciones siguen su curso. Y el hecho de que el Barça esté dispuesto a sacrificar a cuatro jugadores para conseguirlo demuestra hasta qué punto Julián Álvarez es considerado estratégico para el futuro inmediato del club.