Fermín López es uno de los grandes nombres del mercado de fichajes del FC Barcelona. El centrocampista, consolidado como pieza clave en la pizarra de Hansi Flick, ha despertado el interés de media Europa. Entre todos los pretendientes, el Chelsea es el que más fuerte ha irrumpido en la puja.
Enrico Maresca, nuevo técnico de los blues, ya se ha movido en primera persona para convencer al futbolista. Según fuentes cercanas, ha mantenido al menos dos conversaciones directas con Fermín en los últimos días. En ellas, le habría prometido un papel protagonista inmediato y un contrato a la altura de una superestrella.
El mensaje del Chelsea es claro: quieren que el andaluz lidere la nueva reconstrucción en Stamford Bridge. Lo ven como un interior total, capaz de dar equilibrio y llegada, y creen que su estilo encaja perfectamente en la Premier League. Por ello, no han dudado en lanzar una ofensiva económica que supera ampliamente lo que cobra en el Barça.

La postura del Barça ante el asedio inglés
En las oficinas del Camp Nou saben perfectamente lo que ocurre con el canterano. Joan Laporta y Deco consideran a Fermín intransferible salvo que se active una oferta fuera de mercado. Su cláusula de salida está fijada en 70 millones de euros, y el club insiste en que no se aceptará ni un euro menos.
Flick, por su parte, lo tiene muy claro: Fermín es indispensable para la temporada que acaba de comenzar. El técnico alemán lo considera el motor del equipo por su despliegue físico y llegada al área. Sacrificarlo ahora sería un golpe muy duro para la planificación deportiva.
Aun así, en el Barça son conscientes de la magnitud de la propuesta del Chelsea. Los londinenses podrían acercarse a la cláusula y triplicar el salario actual del jugador. La tentación es real y, aunque Fermín se siente feliz en Barcelona, la presión externa es cada vez más intensa.

Un interés que no es nuevo
El Chelsea lleva siguiendo a Fermín desde hace meses, consciente de que su explosión en el Barça no ha pasado desapercibida. En la Premier, su nombre ya sonaba en los despachos de varios equipos, incluidos Manchester United y Liverpool. Sin embargo, ha sido Maresca quien ha decidido dar el paso definitivo para asegurarse a la joya azulgrana.
El técnico italiano considera que Fermín es el perfil que faltaba para completar su centro del campo. Su versatilidad le permite actuar como interior ofensivo, mediocentro creativo o incluso falso extremo. Esa polivalencia, unida a su juventud y carácter competitivo, lo convierten en una apuesta estratégica a medio y largo plazo.
El Barça, sin embargo, mantiene firme su posición. La directiva entiende que la plantilla necesita estabilidad y no puede perder talento diferencial. El recuerdo de ventas dolorosas en el pasado obliga a pensarse dos veces cualquier movimiento que debilite al equipo.

Esta es la locura que prepara el Chelsea
A día de hoy, Fermín percibe alrededor de 6 millones de euros brutos anuales en el Barça. El Chelsea ya le ha trasladado que podría pasar a cobrar cerca de 15 millones brutos por temporada, con bonus por objetivos que dispararían aún más esa cifra.
La oferta de traspaso tampoco se quedaría corta. Los blues estarían dispuestos a poner entre 70 y 80 millones de euros sobre la mesa. Cifras que obligarían al Barça a reflexionar, aunque la voluntad del club sigue siendo mantener al jugador.
Por ahora, Fermín guarda silencio y se centra en el arranque de temporada bajo las órdenes de Flick. En el club interpretan esa cautela como señal de que escucha a todas las partes. Lo cierto es que, con el Chelsea apretando, la presión no hará más que aumentar en los próximos días.