El FC Barcelona está decidido a cerrar una operación doble que podría marcar un antes y un después en su planificación deportiva. La dirección deportiva, liderada por Deco, trabaja contrarreloj para lograr la ansiada inscripción de dos jugadores estratégicos: Nico Williams y Joan Garcia. Pero para que esto ocurra, hay sacrificios importantes que se deben ejecutar de inmediato.
Deco lo tiene claro, hay futbolistas que ya no entran en los planes del club y cuyas salidas son imprescindibles para liberar masa salarial. El primero de ellos es Ansu Fati. El extremo formado en La Masía y criado en Sevilla no ha convencido en su regreso tras la cesión en Brighton, y ahora tiene las maletas hechas rumbo al AS Monaco.

La segunda gran salida es la de Marc-André ter Stegen. Aunque pueda parecer sorprendente, el portero alemán tiene mercado y dos gigantes de la Premier League, Manchester United y Manchester City, están dispuestos a pujar fuerte por él. El Barça cree que esta operación puede dejar más de 35 millones limpios en las arcas, lo que permitiría avanzar en los objetivos prioritarios.
Varias salidas
Oriol Romeu también dejará de ser jugador azulgrana, el mediocentro, que llegó desde el Girona como solución de urgencia, no ha rendido al nivel esperado y será liberado de su contrato. Su ficha no era de las más elevadas, pero cualquier ajuste suma en este momento tan delicado. La dirección deportiva busca rejuvenecer la plantilla y aumentar el nivel competitivo en cada línea.
Con estas salidas, el Barça podrá inscribir sin problemas a dos de sus grandes deseos, Nico Williams es una prioridad absoluta para reforzar los extremos. Su desequilibrio, potencia y capacidad para marcar diferencias por banda son el perfil ideal que busca Hansi Flick. El acuerdo con el jugador está cerrado, y solo falta cumplir con los requisitos del Fair Play Financiero.
Tres bajas importantes
Joan Garcia, por su parte, será el portero de presente y futuro del club. El joven guardameta del Espanyol ha sido una petición directa del cuerpo técnico, que ve en él a un jugador con proyección y personalidad. El portero de Sallent ya ha firmado hasta 2031 y solo falta su inscripción en LaLiga para rubricar todos los tramites.
La revolución silenciosa de Deco ya está en marcha. El portugués ha trazado una línea clara entre los jugadores prescindibles y los que deben liderar el nuevo proyecto. Ansu, Ter Stegen y Romeu son los primeros damnificados de una limpia necesaria para que el Barça vuelva a competir por todo.
Por su parte, Ter Stegen tiene muchos números de irse con Ansu al AS Monaco. El equipo tiene mucho interés en reemplazar a André Onana.
La llegada de Nico Williams y Joan Garcia marcará el inicio de una nueva etapa, más rápida, más intensa y más ambiciosa. Flick ya lo ha comunicado en privado: necesita refuerzos con hambre y personalidad, y Deco está dispuesto a hacer lo que haga falta para dárselos. Aunque eso implique decisiones dolorosas.