En el vestuario del FC Barcelona hay un mensaje claro, esta vez no viene de un veterano, sino de la nueva joya del club. Lamine Yamal, con apenas 18 años, tiene las ideas muy claras sobre lo que significa vestir la camiseta blaugrana. Y no se anda con rodeos cuando se trata de hablar de Nico Williams, su gran amigo fuera del campo, pero a quien no perdona una doble traición.
A pesar de su buena relación Lamine cree que el extremo del Athletic ya ha tenido suficientes oportunidades para unirse al Barça, no solo lo ha rechazado una vez, sino dos. Para el joven talento, eso es una falta de compromiso imperdonable con un club que solo abre sus puertas a los que realmente quieren estar. El mensaje es contundente: si has dudado del Barça, no mereces vestir sus colores.

La postura de Lamine Yamal recuerda a una frase histórica de Johan Cruyff: “El que dude de jugar en el Barça, que no venga”. El mito neerlandés siempre defendió que el tren azulgrana pasa una sola vez, y que quien lo deja pasar, no tiene segundas oportunidades. En el caso de Nico Williams, ese tren no solo pasó una vez, sino dos, la tercera, si llega, parece que encontrará las puertas cerradas.
Puerta cerrada
En el club saben que el jugador del Athletic es una pieza codiciada en Europa, su velocidad, regate y capacidad para romper defensas encajan en el perfil que busca el Barça. Sin embargo, para Lamine Yamal, el talento no lo es todo. La lealtad, el deseo y la ambición por vestir la camiseta blaugrana son valores que pesan igual o más que las cualidades técnicas.
El propio Lamine, que creció soñando con triunfar en el Camp Nou, considera que rechazar al Barça dos veces es un mensaje claro: no tienes el compromiso necesario para ser culé. Y eso, en un club que atraviesa dificultades económicas y necesita cada refuerzo con fe absoluta en el proyecto, es inaceptable.
El tren ya paso
La realidad es que Nico Williams ha preferido continuar su carrera en San Mamés, priorizando la estabilidad y el proyecto del Athletic. Una decisión totalmente respetable para muchos, pero que en el entorno culé se interpreta como una falta de ambición por jugar en uno de los clubes más grandes del mundo.
Ahora, con el Barça buscando soluciones para reforzar su ataque, el nombre de Nico vuelve a aparecer. Sin embargo, las palabras de Lamine Yamal suenan como un aviso. La camiseta blaugrana no es para todos, y mucho menos para quienes la han despreciado dos veces.
El tren pasó, según Lamine Yamal, no hay billete de vuelta, en el mundo del fútbol, las oportunidades son oro, y en el Barça se pagan muy caras. Si Nico Williams soñaba con un futuro en el Camp Nou, puede que ese sueño haya terminado para siempre.