Lamine Yamal renovó hace semanas su contrato hasta 2031, y se consolida claramente como la piedra angular del proyecto deportivo a largo plazo. Su renovación no solo garantiza estabilidad, sino que también envía un mensaje contundente sobre el rumbo que quiere tomar el club.

Con solo 17 años, Lamine ha roto todos los moldes. Su desparpajo, técnica y capacidad para desequilibrar lo han convertido en la gran estrella emergente del fútbol europeo. El Barça lo sabe, por eso le ha blindado con un contrato de larga duración y una cláusula de rescisión astronómica.
Un proyecto joven de la mano de Hansi Flick
Y no estará solo. Con Flick, el Barça está construyendo un proyecto basado en juventud, talento y proyección. A su alrededor, Lamine estará acompañado por Pau Cubarsí, Gavi, Alejandro Balde, Jules Koundé, entre otros.
Flick, conocido por su apuesta por el fútbol ofensivo y el desarrollo de jóvenes talentos y con el bagaje de esta temporada, tiene en sus manos una plantilla con potencial enorme.
Nico Williams, el siguiente objetivo
Para reforzar aún más ese núcleo, el Barça tiene como gran objetivo de mercado a Nico Williams. El extremo del Athletic Club, amigo de Lamine Yamal, se considera la pieza que falta para completar un ataque letal. Las conversaciones con su entorno están avanzadas y el club azulgrana quiere cerrar su fichaje este verano.

La llegada de Nico aportaría velocidad, desborde y calidad en el último tercio, y también consolidaría una asociación natural con Lamine en el campo. Ambos jugadores se entienden muy bien dentro y fuera del terreno de juego, y su conexión sería clave para el Barça de los próximos años.
Lamine tiene otra petición
Además, Lamine Yamal habría hecho saber su deseo de que Fermín no abandone el equipo. El joven extremo considera a Fermín una pieza clave en el vestuario y valora su calidad técnica y compromiso con el grupo. A pesar de no haber contado con todos los minutos esperados esta temporada, el mediapunta sigue siendo muy cotizado en el mercado.
Chelsea, Bayern de Múnich y otros clubes europeos ya han mostrado interés por Fermín, conscientes de su potencial. Sin embargo, el Barça, animado por el respaldo de Lamine, no quiere desprenderse de él. Aunque el verano es largo y puede haber sorpresas, la intención del club es que no salga.